El Instituto Nacional Penitenciario (INPE) realizó una requisa y la desinstalación de conexiones eléctricas en el Establecimiento Penitenciario Ancón II, como medida para contribuir a la seguridad ciudadana y la lucha contra la extorsión que afecta a los peruanos.
Más de 40 efectivos de seguridad interna y seguridad externa del Instituto Nacional Penitenciario participaron de la requisa de revisión en el pabellón 2A, ellos se desplazaron por los distintos ambientes del establecimiento penitenciario y realizaron la búsqueda exhaustiva de artículos y sustancias ilícitas en celdas, además de patios y cocinas. Se trasladó a cada interno al patio para la revisión corporal cumpliendo los protocolos respectivos de seguridad penitenciaria.
Al respecto, el presidente del INPE, Iván Paredes Yataco dijo que, a través de estas acciones, el gobierno busca hacerle frente al crimen organizado y devolver la tranquilidad a los peruanos “Día, noche y madrugada venimos ingresando a los penales con requisas inopinadas que frustren cualquier ilícito que pudieran organizarse desde las cárceles”.
Como resultado de la intervención se halló en la celda 03 del 1er piso, del pabellón 22 del módulo IV: 3 envoltorios transparentes conteniendo quetes de papel blanco, mismos que podría tratarse de sustancias ilícitas y 2 envoltorios transparentes, dentro de un pomo de plástico amarillo (usado para talco de pies), con marihuana. Las autoridades penitenciarias comunicaron del hecho a la Fiscalía de Santa Rosa, y la DEPINCRI de Puente Piedra.
Paredes Yataco agregó que los internos implicados en ilícitos penales serán trasladados a penales de mayor contención y alejados de su entorno, como, por ejemplo, Challapalca y al Centro de Reclusión de la Base Naval del Callao, CEREC.