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Vichama, la ciudad que dejó testimonio de su historia y cómo enfrentó el cambio climático

Ruth Shady expresa importancia de que la ciudadanía conozca este sitio arqueológico

Vichama, la ciudad que dejó testimonio de su historia para transmitir valores y mensajes. Foto: ANDINA/Daniel Bracamonte.

Vichama, la ciudad que dejó testimonio de su historia para transmitir valores y mensajes. Foto: ANDINA/Daniel Bracamonte.

11:49 | Vichama, oct. 4.

Por Julio Castillo Bellido, enviado especial

"La ciudadanía debe acudir a conocer Vichama para que entienda el valor que tienen estos sitios de nuestros antepasados, que causan admiración en el mundo", afirma Ruth Shady Solís, antropóloga, arqueóloga y educadora, directora de la Zona Arqueológica Caral (ZAC), Unidad Ejecutora 003 del Ministerio de Cultura, y principal investigadora de la Civilización Caral, la más antigua de América.

De esta manera destaca en una entrevista para la Agencia Andina la importancia de este sitio arqueológico Vichama, ciudad agropesquera, ubicada en el distrito de Végueta, provincia de Huaura. al norte de la región Lima y que surge después de la Ciudad Sagrada de Caral debido a la sequía.


Shady resaltó que Vichama, cuyos orígenes datan de 1800 antes de Cristo, revela conocimientos de sus habitantes en infraestructura, medio ambiente,  construcción, alimentación, tecnología, avances científicos, textilería, arte y diseño  que les permitió hacer frente a los sismos,  la hambruna y la sequía donde destaca igualmente lo importante de las relaciones con otros pueblos y culturas tanto de la Costa como de la Sierra y la Selva,  tal como ocurrió con Caral.



"Las excavaciones están mostrando una serie de conocimientos como las shicras, que son bolsas de gran tamaño, elaboradas con fibra vegetal, las cuales eran llenadas con piedras y se ponían en la construcción de los edificios usadas como relleno, lo que les permitía mitigar los efectos de los sismos", afirmó.

La investigadora recordó que hace un tiempo, luego de las publicaciones sobre los descubrimientos, arribaron al país ingenieros japoneses "a los que les dimos toda la información de las shicras y luego de un tiempo nos dijeron que, 5,000 años después, la iban a aplicar en sus construcciones".


"Cuando les pregunté qué iban a dejar a Perú, no dijeron nada", refirió la doctora Shady al recordar que se puso en conocimiento del Ministerio de Vivienda ese tipo de bolsas para ser aplicadas en nuestro país; pero, si bien en principio se obtuvo una respuesta positiva, "todo quedó allí con el cambio de ministro".



En ese aspecto dijo que en Perú no hay continuidad en la gestión pública, porque cuando llega una nueva autoridad no quiere saber nada de la anterior y deja todo de lado para hacer otras cosas.

Luego retoma el tema de los descubrimientos y afirma que "hay una sabiduría tradicional ancestral que es importante recobrar y aplicar, por eso la importancia de recuperar esos conocimientos, y las shicras son una tecnología sismorresistente".

Perú es un país sísmico y los antiguos peruanos supieron enfrentar esas situaciones a través de sus construcciones antisísmicas, como se muestra en todo el valle del río Supe, enfatizó.

Ruth Shady indicó, en ese aspecto,  que los estudios revelan que la civilización Caral, que cubrió todo el valle, vivía en armonía con la naturaleza, "porque supo conocerla, supo entender los microclimas y  las condiciones geomorfológicas del territorio donde vivían, y  con respeto a la tierra, a los ríos, lo que es relevante en un país como el nuestro, que está atravesado por los Andes".


Mencionó también el algodón de color hallado en Vichama y en zonas aledañas, que causó asombro en el mundo y que hoy se cultiva en otros países como Francia, y sin embargo no ocurre lo propio en Perú.

Otro producto que mencionó fue la achira, planta que era de suma importancia para la alimentación en el valle, pero donde se ha perdido su cultivo; a diferencia de Colombia, que la vende como chizitos y tiene un sabor agradable.


La historia del clima, la sequía y la hambruna


El mensaje es claro en Vichama: los relieves de los murales plasman a personas que registran, para la memoria colectiva del futuro, los acontecimientos de hambruna y muerte causados por la escasez de recursos debido al cambio climático. Por ello hay frisos con adultos famélicos fallecidos, al igual que jóvenes flacos con signos de desnutrición, en una danza entre dos peces.

En el recorrido que realizó Ruth Shady por los edificios de Vichama hasta ahora descubiertos, destacó en principio el equipo de arqueólogos y todo personal de excavadores donde se realizan un trabajo "multidisciplinario, interdisciplinario y transdisciplinario", que también integra a especialistas de otras profesiones (antropólogos, sociólogos, ingenieros, arquitectos, entre otros) "para comprender todo lo que se va descubriendo". 

En ese aspecto afirmó que el sitio arqueológico asentado en Végueta refleja claramente lo que ocurrió respecto al cambio climático.

Explicó que en las plataformas de los edificios han quedado registrados los efectos que tuvo el cambio climático que afectó a la civilización Caral (3800-1800 a. C.) y a todo el valle de Supe, para que las siguientes generaciones tuvieran conocimiento de lo que allí ocurrió.



Mientras recorría el lugar dijo que se han descubierto frisos (en un primer nivel) con figuras en relieve que muestran a hombres adultos con los ojos cerrados y las costillas marcadas; además de dos serpientes, que son una muestra de la hambruna existente, de acuerdo a los estudios realizados.

En el segundo nivel, otras figuras muestran cuerpos de jóvenes con los ojos abiertos en una especie de danza entre dos peces, que representan que el alimento viene del mar. En la parte superior, tercer nivel del edificio, está el rostro de un sapo con un rayo en la cabeza que representa la llegada de las lluvias.

Cada nivel es un período, perfectamente diseñado de lo ocurrido en Vichama, de todo lo que pasaron por efectos del clima, enfatiza Ruth Shady.

Para la investigadora esta es la memoria de los habitantes de Vichama para recordar los tiempos vividos respecto a la escasez de alimentos, la falta de lluvias pero que no sucumbieron en esa época porque estaban al lado del mar, que les proveía de alimentos.

Precisamente, en esa parte explica que los pescados que están con las figuras de los jóvenes no son pequeños, sino grandes, propios de aguas calientes, que es lo que sucede con el mar cuando aparece el Fenómeno de El Niño.

"Por eso es importante toda la información de dicho evento climático y que se debe aprovechar en momentos en que en diversas partes del mundo ocurren inundaciones, deshielos e incendios forestales", reflexiona.


Agrega que la información recuperada sobre los conocimientos que desarrollaron en ciencia y tecnología, de la historia social y cultural de Vichama, es importante y beneficiosa para la población local, nacional e internacional.


Protección frente a El Niño


En otra parte de sus declaraciones, Shady anunció que se están tomando todas las medidas necesarias para proteger las principales zonas de excavación en Vichama ante las lluvias anunciadas por el Fenómeno de El Niño.


Indicó que el Ministerio de Cultura entregará una partida para reforzar lo sitios arqueológicos, sobre todo los edificios (con techos de junco, plásticos y canaletas) donde están los frisos, y evitar que las lluvias hagan daño el trabajo realizado.



(FIN) JCB/MAO
GRM

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Publicado: 4/10/2023