En un escenario global marcado por la desaceleración económica y la incertidumbre política, la economía peruana se posiciona como una de las más resilientes de la región.
Según el informe “Evolución y perspectivas de la economía latinoamericana – Edición Especial Perú-Brasil, elaborado por Asfinsa asesoría y negocios, a solicitud de la Cámara de Comercio Brasil Perú (Cambraper), el PBI nacional crecería 3.3% en 2025, impulsado por la inversión minera, la infraestructura y la demanda interna.
El estudio revela también que el país tiene mejores fundamentos macroeconómicos frente a sus pares de la región, ya que cuenta con un aliado estratégico como Brasil para potenciar su comercio exterior e impulsar inversiones en sectores clave como energía, agroindustria y logística.
Contexto regional
Así, mientras Latinoamérica se expande por debajo del promedio mundial en 2025, Perú logró un crecimiento interanual de 4.52%, sostenido por el dinamismo de la construcción y la manufactura.
Además, resalta que el riesgo país (EMBI) se mantiene en 3.68%, por debajo del promedio regional, lo que evidencia la confianza de los inversionistas en la estabilidad macroeconómica local.
Otro factor que refuerza la estabilidad de la economía peruana es el nivel de reservas internacionales, que alcanzan los 87,550 millones de dólares, equivalente al 31.2% del PBI, uno de los buffers más sólidos de la región para enfrentar shocks externos.
En materia de precios, la inflación cerraría en 2.1% este año, dentro del rango meta del BCR, y se prevé un ligero repunte a 2.5% en 2026 por presiones cambiarias y ajustes en tarifas públicas.
El tipo de cambio, por su parte, se ubicaría en 3.60 soles por dólar en 2025, con una depreciación moderada a 3.70 soles en 2026 debido a la volatilidad electoral.
Socio estratégico
El comercio bilateral entre Perú y Brasil bordea actualmente los 5,200 millones de dólares anuales, sustentado en el Acuerdo de Complementación Económica (ACE 58) bilateral.
Para Cambraper es momento de modernizar este acuerdo, incorporando capítulos de digitalización, sostenibilidad y facilitación del comercio que permitan profundizar la integración económica.
“Brasil no es solo un socio comercial, es un socio estratégico que puede ayudarnos a cerrar brechas tecnológicas e impulsar proyectos de envergadura binacional”, señala el presidente de Cambraper, Rafael Torres Morales.
Algunos proyectos
Entre esas iniciativas destacan el Tren Bioceánico, que conectaría el Atlántico con el Pacífico, y el Puerto de Chancay, que podría convertirse en un hub logístico regional con la participación de empresas brasileñas.
De acuerdo con el informe, elaborado por la consultora Asfinsa, a requerimiento de Cambraper, las oportunidades de inversión que ofrece Brasil al Perú se concentran en cuatro grandes áreas:
- Energía: con proyectos de hidrógeno y amoníaco verde que demandarán cooperación tecnológica.
- Agroindustria: donde la complementariedad de climas y mercados abre espacio para joint ventures.
- Minería: con Brasil como demandante de minerales críticos para la transición energética.
- Logística e infraestructura: para reducir costos y tiempos en el comercio bilateral.
“Las relaciones bilaterales con Brasil son claves para diversificar nuestra economía y ganar competitividad. La modernización del ACE 58 es un paso imprescindible para consolidar esta alianza estratégica”, sostiene Torres Morales.
Refiere que con la recuperación económica en marcha, Perú se perfila como un destino atractivo para la inversión extranjera.
En este sentido, Cambraper remarcó que fortalecer la relación con Brasil será fundamental para consolidar al país como un hub económico regional y enfrentar los desafíos de la economía global.
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(FIN) NDP/SDD