Por Miguel De la VegaEl vicepresidente del grupo Moody’s Investors Service, Jaime Reusche, señaló hoy que se requiere más tiempo de análisis y debate para una reforma del sistema previsional del Perú, por cuanto el proyecto del Congreso tendría efectos negativos en la economía peruana.
Señaló que es comprensible que el Congreso quiera hacer algo, ante lo que percibe como un problema que afecta a muchos peruanos.
“Pero, pareciera que el proyecto de ley es muy atropellado en tratar de buscar una solución rápida con poco debate y casi nula consideración a los problemas de raíz”, indicó.
El proyecto de ley aprobado en enero último por la comisión especial para la reforma integral del sistema previsional que preside la congresista Carmen Omonte, plantea la integración del sistema público y privado de pensiones.
“Sea cual fuese el Congreso que busque hacer cambios al sistema de pensiones, debe tomarse el tiempo de entender cuáles son las causas fundamentales de la baja participación y reducidos beneficios en el sistema de pensiones, algo que puede tomar meses de estudio para entender y diagnosticar, en particular si no se es especialista en pensiones”, dijo.
“La tentación siempre va a favorecer el facilismo de buscar salidas rápidas cuando lo que necesitamos es un debate muy honesto, para que el ciudadano de a pie pueda entender que es un tema complejo, sensible y donde no hay soluciones fáciles”, agregó.
Impacto negativo
De otro lado, Reusche, advirtió que el actual proyecto en el Congreso impactaría de forma negativa en la economía del país.
“Tal como está planteada, la medida tendría implicaciones mixtas para la calificación de riesgo del Perú y un efecto negativo para la economía”, afirmó.
Refirió que la intensión del proyecto es ampliar la cobertura del sistema de pensiones y mantener cuentas de capitalización individuales, para luego sumar un fondo común, tratando de imitar el sistema que tiene Suecia.
“Pero, hay algunas deficiencias en los supuestos implícitos que plantea la reforma”, agregó.
Indicó que la realidad del Perú es muy distinta a la de Suecia u otros países desarrollados que tienen un sistema similar, porque el nivel de informalidad es exponencialmente mayor en el Perú, la proporción de contribuyentes al sistema de pensiones mucho menor, y el ingreso promedio es bastante menor.
“Además, los incentivos para contribuir al sistema por la forma de reparto son negativos, porque quienes sí contribuyen al sistema, estarían tomando pérdidas para subsidiar a los que no contribuyen, pero que recibirían una pensión del fondo común”, dijo.
Refirió que el sector público aún tiene déficits en su capacidad de gestión y planificación, sin embargo indicó que “solamente las instituciones económicas en el sector público tienen altos niveles de personal calificado, eficiente, transparente y honesto con adecuados niveles de control operativo”.
“Pero, eso es producto de décadas de desarrollar esa capacidad técnica y probablemente una institución joven como la que propone el proyecto de ley, que sería la encargada de gestionar las pensiones, posiblemente se demoraría en capacitar a su personal y podría ser politizada”, indicó.
Salud fiscal del Estado
De otro lado, Reusche señaló que con algo tan sensible como las pensiones, abrir la puerta a este tipo de incertidumbre “es extremadamente peligroso” para el bienestar de los contribuyentes y la salud fiscal del Estado.
Refirió que reducir el rol de las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFPs) enviaría un mensaje negativo sobre el respeto a los contratos, a los inversionistas locales y extranjeros.
“Si las inversiones de largo plazo no se respetan, se pierden incentivos para atraer inversiones que generen empleo o ayuden al país a desarrollar nuestra infraestructura financiera en el mercado de capitales local”, dijo.
Además indicó que la infraestructura física del país tiene deficiencias enormes y está muy rezagada con respecto a muchas economías emergentes.
En ese sentido, señaló que de ser aprobado, el proyecto de ley adoptaría una ley marco, donde muchos detalles estarían todavía pendientes y requerirían de varias medidas complementarias que futuros gobiernos tendrán que diseñar.
“Aquí también se generaría mucha incertidumbre porque muchas de las medidas complementarias podrían verse vulnerables al populismo mercantilista que está surgiendo”, puntualizó
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(FIN) MDV / MDV
Publicado: 8/2/2021