Andina

Gianfranco Brero: Soy medio ermitaño

Gianfranco Brero. Caricatura: Tito Piqué

Gianfranco Brero. Caricatura: Tito Piqué

10:05 | Lima, jul. 05 (ANDINA).

Por Susana Mendoza

Nuestro actor nacional, ganador de Concha de Plata en el festival de cine de San Sebastián, quiere regresar a las tablas. Sin embargo, por el momento, Gianfranco Brero Pinasco, celebra sus cinco años en el programa 3G que transmite Plus TV

Cinco años conduciendo 3G ¿se pasaron rápido?
Demasiado rápido, pero no porque el medio de TV lo haga así ni porque mi vida sea agitada. Hoy en día estamos llenos de obligaciones, y tenemos poco tiempo para contemplar lo que nos está sucediendo.

¿Qué le gustaría contemplar?
Contemplar, el sólo hecho de mirar sin necesidad de poner un juicio, sin bien ni mal. Pero nuestro mundo es muy acelerado y complejo.

Y eso que usted está en TV por cable, donde el trabajo es más pausado…
Es que yo no me dedico sólo a conducir 3G. El programa es una parte de mi vida, sólo le dedico ocho horas a la semana.

En el programa observa…
Escucho, es lo más importante allí. Y me gusta oír historias más que ideas.

¿Se ha sentido miserable u orgulloso de sí mismo cuando escucha esas historias?
No, porque conmigo no es la cosa. Yo escucho, participo, me integro; pero cada quien tiene su historia personal, algunas aportarán a mi vida otras no.

¿Y su historia en qué se ha caracterizado?
En general mi vida es tranquila. Lo interesante es que tuve contacto con el teatro desde niño, de una manera muy natural.

¿Cree que el teatro le ha dado tranquilidad a su vida?
No sé si tranquilidad, pero le ha dado una dimensión. La tranquilidad me la ha dado el budismo donde el proceso de contemplación, por ejemplo, se hace más intenso.

¿Qué le dio el teatro?
Me dio un espacio público de expresión interesante, y eso gracias a mis viejos. Pude vincularme con personas que para algunos eran excepcionales porque no eran comunes y corrientes. Pero para mi sí porque las veía siempre. Por ejemplo en la época de oro de teatro conversaba normal con Ricardo Blume o Saby Kamalich

¿Les decía tíos?
No, los tuteaba desde chiquito. Los trataba de “don” a Ricardo Roca Rey y Luis Álvarez, porque a Pablo Fernández le gustaba que lo llamara por su nombre.

¿El teatro le dio una visión de la vida?
No, me dio una forma de comunicarme con el mundo. Fui una persona muy tímida, de poca relación con el mundo externo. Subir al escenario era natural. Yo no estudié teatro.

El teatro cambió su vida…
Le dio una dinámica a mi vida, porque veinte años después me vinculé al budismo. Tenía 30 años.

¿Estaba buscando algo en ese momento de su vida?
Llegó, y lo primero que hizo fue satisfacer una inquietud intelectual. Tengo una gran admiración por el budismo.

¿Qué explicaciones le dio el budismo?
Que la mente es una zona de procesamiento. Uno tiene noticias de la naturaleza de su mente porque piensa. El pensamiento es el reflejo del espejo, pero no es el espejo en sí.

¿Qué descubrió de su mente?
Que el pensamiento es una forma que toma la mente, pero la mente no tiene forma…

Y los pensamientos no son absolutos…
Ningún pensamiento es absoluto. Ninguno. Y la búsqueda de pensamientos absolutos expresa la necesidad de tener seguridad en todo, de creer que se es inmortal, que se tiene la verdad. Pero todo es relativo. Todo.

¿Lo siente así?
Cada día lo siento más. Un aporte lo da la edad. Veo a mi hija cuando le ocurre algo, y ella siente que es definitiva, fatal y para siempre una experiencia triste.

¿Qué es lo que más ha relativizado?
La verdad.

¿Tiene alguna certeza?
Creo que la experiencia es lo único que nos permite tener una certeza. Si uno experimenta, eso tiene cierta validez.

¿Qué certeza tiene?
Que todo termina, eso para mi es una certeza absoluta. Todo tiene su final, todo cambia., y eso me ayuda a relativizar las cosas.

¿Cuál es su espíritu?
Soy un hombre bastante alegre, pero taciturno. Así como me ve hablar, tengo espacios muy personales. Soy más bien hermético medio ermitaño, de salir poco a la calle, prefiero estar en mi casa, yo me guardo.

¿Qué guarda, afectos?
Me gusta estar en mi espacio calmo, sin tantas agitaciones. La calle está en contante ebullición.

Pero conducir un programa de TV es complicado…
Para el trabajo que hago, no. No es que salga a la calle y la gente se me tire encima. El medio donde trabajo es de señal cerrada y llega a ciertos sectores sociales.

¿Qué le encanta hacer?
Me gusta actuar, me encanta, pero no puedo hacerlo constantemente porque tengo que vivir. Me gusta que la gente me reconozca por mi trabajo de actuación. Es gratificante. Pero como lo he dejado en estos años, me reconocen por la TV porque siempre manda ese medio.

¿Qué le disgusta?
Me dan miedo las cavernas, no por claustrofobia, sino por la sensación que me produce no saber hacia dónde va ese túnel. Me da escalofríos.

¿Le asusta la andropausia?
No. Es más, ya estoy en el proceso de andropausia, y es gradual, cambian algunas cosas. Por ejemplo, tengo mal humor. Me he vuelto más renegón, y la razón no sólo tiene que ver con la cuestión hormonal, sino también con el cuerpo que ya no funciona como antes, en varios aspectos.

¿Qué aspecto se le ha resentido más?
Uno siempre cree que es lo sexual, claro ya no hago las maratones de antes (risas) pero es todo.

¿Es un hombre romántico?
Más que el romance, me gusta mucho la ternura. Soy una persona muy tierna, me parece la forma más bonita de acercarse a otra. No me gusta la forma agresiva.

¿Comparte esta visión con sus hijos?
No estoy seguro, pero intuyo que los dos lo han aprendido, pero no sólo por mi sino por su mamá también.

¿Cómo es su esposa, racional como usted?
Ella es fantástica. Es como el personaje de la niña en la película el Barón de Munchausen, que le pedía a él que no se muriera porque ella sólo quería fantasía. Así es mi mujer, ella vive con la fantasía.

¿Se complementan?
Si, yo soy mucho más racional. Ese contraste nos abre espacios. Es muy lindo. Si los dos fuéramos fantásticos no aterrizaríamos nunca.

¿Siente que tiene una deuda con el teatro?
Tengo ganas de volver a hacer teatro. Me muero de ganas. Pero primero termino de pagar mis deudas reales (risas).

(FIN) Variedades


Publicado: 5/7/2010