Día de la Niña: 40 % de trastornos mentales en adultos se originan en primera infancia

Especialista del INSM advierte que sufrimiento infantil temprano deja huellas cerebrales duraderas.

Especialista señala que el sufrimiento infantil temprano deja huellas duraderas en la vida. Foto: Andina

Especialista señala que el sufrimiento infantil temprano deja huellas duraderas en la vida. Foto: Andina

09:30 | Lima, oct. 11.

Más del 40 % de los trastornos mentales en adolescentes y adultos tienen su origen antes del nacimiento y durante la primera infancia, alertó el Dr. Rolando Pomalima Rodríguez, director ejecutivo de la Dirección Ejecutiva de Investigación, Docencia y Atención Especializada de Niños y Adolescentes (DEIDAE de NyA) del Instituto Nacional de Salud Mental “Honorio Delgado – Hideyo Noguchi” (INSM “HD-HN”)

En el marco del Día Internacional de la Niña, que se conmemora cada 11 de octubre, el especialista explicó que esta etapa es crítica, ya que millones de conexiones neuronales moldean la arquitectura cerebral. “Cada sinapsis vibra con impulsos eléctricos y neurotransmisores que sustentan la regulación emocional, la respuesta al estrés y las habilidades sociales”, precisó.


Las experiencias tempranas —positivas o negativas— literalmente esculpen el cerebro-mente, convirtiendo la química en significado y conducta”, subrayó el Dr. Pomalima. En ese sentido, recalcó que el sufrimiento infantil temprano deja huellas duraderas y que la prevención es la estrategia más eficaz y costo-efectiva en salud pública. Detalló que durante la infancia, situaciones como el abuso, la negligencia, la violencia familiar o la pobreza extrema generan estrés tóxico. Este eleva los niveles de cortisol y afecta áreas cerebrales clave como el hipocampo (memoria), la amígdala (miedo) y la corteza prefrontal (autocontrol). 

Estas alteraciones pueden predisponer a ansiedad, depresión, trastornos del neurodesarrollo o de la conducta en etapas posteriores de la vida”, advirtió el director de DEIDAE-NIÑOS.

Frente a este panorama, el Dr. Pomalima destacó el apego seguro entre el niño y sus cuidadores como un núcleo protector esencial. Basado en la sensibilidad y la respuesta coherente a las necesidades del niño, este vínculo fomenta confianza, aprendizaje y autorregulación emocional.

Por el contrario, un apego inseguro o desorganizado, resultado de cuidados erráticos o traumáticos, puede generar modelos internos marcados por el miedo, la desconfianza o la vergüenza. “Estos modelos luego se expresan como dificultades emocionales, atencionales o relacionales”, indicó.

El experto hizo un llamado especial sobre la situación de las niñas. “Las niñas enfrentan mayores vulnerabilidades derivadas del género, la pobreza o la discapacidad, factores que aumentan su exposición a la violencia y al estrés, haciéndolas más propensas a desarrollar trastornos mentales complejos”, afirmó. 

Asimismo, recordó que el cerebro no es una estructura fija, sino una red viva que se transforma con la experiencia. La epigenética y la neuroplasticidad demuestran que cada emoción, vínculo o aprendizaje modifica las conexiones neuronales. “La mente surge del diálogo entre el cuerpo, el entorno y los otros, en un proceso que comienza desde la gestación”, citando conceptualmente a Antonio Damasio.

El mensaje central del especialista es esperanzador: invertir en la primera infancia es construir una sociedad más sana y resiliente. “No se trata solo de una acción médica o psicológica, sino de una inversión social y económica”, enfatizó.

Comprender que cuatro de cada diez trastornos mentales en adultos se originan en los primeros años de vida nos obliga a replantear prioridades: fortalecer a las familias, capacitar a educadores y profesionales de la salud, y garantizar entornos seguros y emocionalmente nutritivos para cada niño y niña”, sostuvo.


Finalmente, citando al neurocientífico Erik Kandel, el Dr. Pomalima concluyó con un potente recordatorio: “Cada vez que aprendemos algo nuevo, cambiamos la estructura física del cerebro”, destacando así la inmensa capacidad de transformación que yace en una crianza positiva y en las oportunidades de aprendizaje temprano.

El Día Internacional de la Niña fue proclamado por la Asamblea General de las Naciones Unidas el 19 de diciembre de 2011. Esta proclamación responde a la necesidad de reconocer los derechos de las niñas y los desafíos únicos que enfrentan en todo el mundo. La iniciativa busca promover el empoderamiento de las niñas y asegurar el cumplimiento de sus derechos humanos, apoyándolas para que puedan desarrollarse plenamente y convertirse en agentes de cambio en sus comunidades. 

La propuesta fue presentada formalmente por Canadá, con el apoyo de International Plan, una organización no gubernamental que trabaja a nivel mundial para mejorar la vida de las niñas a través de su campaña: Because I Am a Girl.




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(FIN) NDP/ICI

Publicado: 11/10/2025