Compartimos el comentario del editor Ernesto Carlín a la película de Netflix "Los despiadados".
Santo Russo (Riccardo Scamarcio) llega a Milán, siendo adolescente, desde su natal Calabria.
Debe soportar las privaciones de una familia pobre mientras observa a paisanos suyos conectados con la sanguinaria Ndrangueta (mafia calabresa).
Por andar mataperreando, termina en una correccional y comienza una vida delictiva exitosa.
Es una película con un argumento conocido: ascenso y caída de un delincuente. Sin embargo, este tópico es bien narrado, teniendo varias escenas y diálogos muy bien logrados.
La narración empieza mostrándonos al protagonista en lo más alto de su carrera, a punto de enfrentarse con el problema que generará su caída.
Pero antes de ello, hace un recuento de su vida. Algunos elementos hacen recordar a películas como Goodfellas.
Es interesante cómo se observa él mismo. Son constantes las referencias a ser él un hombre honorable y a intentar distinguirse de los demás delincuentes desde características como su ropa, su familia y su vida amorosa.
Igual hay que prestar atención a otros eufemismos como llamar milagros a los asesinatos o la frase en francés que repiten sin saber exactamente su significado los personajes que le rodean.
Para la polémica queda si el uso seguido del desnudo femenino es gratuito o responde a la historia de una sociedad machista como es la de una mafia italiana.
Imperdible: el diálogo en el que un matón compara matar a su abogado con el deceso del papa, “se pone otro cualquiera y listo”.
Ficha técnica
Los despiadados
Título original: Lo spietato. Italia, 111 minutos. Dirige: Renato De Maria. Actúan: Riccardo Scamarcio, Sara Serraiocco, Alessio Praticò, Alessandro Tedeschi, Marie-Ange Casta, Valentine Payen, Fulvio Milani, Matteo Leoni, Fabio Pellicori y Fortunato Verduci. Guion: Renato De Maria, Federico Gnesini, Valentina Strada. Es una producción de Netflix.
(FIN) ECG
Publicado: 7/5/2019