Los últimos resultados de la Evaluación Censal de Estudiantes (ECE) y la Evaluación Muestral de Estudiantes (EM), revelaron que el rendimiento en matemáticas de los escolares peruanos ha empeorado, siendo los alumnos de segundo grado de escuelas públicas los que mayor retroceso han experimentado.
¿Qué está ocurriendo? Para David Dockterman, catedrático e investigador de la universidad de Harvard y experto en innovación educativa, una de las razones principales de esta desalentadora realidad está relacionada con la
metodología de la enseñanza de las matemáticas.
Al respecto, afirma que las matemáticas podrían convertirse en una asignatura amigable y didáctica si se empleara una novedosa metodología basada en conectar las emociones de los estudiantes con el aprendizaje.
El experto, quien estuvo en el Perú para participar del Primer Congreso de Matemáticas realizado por el grupo Santillana, señala que primero los maestros deben creer que sus alumnos pueden aprender las matemáticas y darles la seguridad de esto a través de una cultura participativa en el salón.
Dijo que lo importante acá es que no se debe ver a las matemáticas como una competencia o de simple resultados, sino emplear una metodología dónde involucre una dinámica integrada con los alumnos.
“Donde los estudiantes puedan participar y evaluar en el procedimiento que utilizan para llegar al resultado ya sea correcto o negativo. Esto permitirá que el alumno pueda analizar los errores y aciertos del problema”, explicó.
Otra de las técnicas recomendadas por el experto es contar un problema de matemática como si fuera una historia, esta sería una opción dinámica y asertiva para aprender la materia pues al contarlo como un relato una parte de nuestro cerebro reacciona, produce empatía con los personajes, capta el interés del estudiante y comienza a predecir brindando posibles respuestas al problema.
“Los padres deben apoyar en casa, involucrarse más en la materia. Muchas veces cometemos el error de decir: no te puedo ayudar porque la matemática no es lo mío, y de manera predisponemos a nuestros hijos a que crean que tampoco no es bueno. Nosotros debemos mostrar el interés en el proceso para que ellos se esfuercen”, argumentó.
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(FIN) NDP/LIT
Publicado: 31/8/2019