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¿Terapia de pareja? Cuándo es necesaria y cuándo no [video]

En vísperas del Día de San Valentín, expertos analizan las causas más frecuentes para buscar ayuda profesional

En vísperas del Día de San Valentín, expertos analizan las causas más frecuentes para buscar ayuda profesional. Foto: INTERNET/Medios

En vísperas del Día de San Valentín, expertos analizan las causas más frecuentes para buscar ayuda profesional. Foto: INTERNET/Medios

11:13 | Lima, feb. 13.

Todos soñamos con una relación de pareja que nos permita crecer personalmente, que sea fuente de cariño, seguridad, alegría; sin embargo, esto no siempre se consigue y a veces el vínculo puede convertirse en fuente de peleas y sufrimiento. ¿Una terapia de pareja puede ser la solución? Aquí te contamos cuándo esta puede dar frutos y cuando esta no será una buena opción.

“Muchos consideran que nos flechamos, nos enamoramos y punto; todo funcionará bien. Esas son ideas del amor romántico que hay desecharlas. Nos hacen creer en relaciones utópicas, donde no hay conflictos, donde todo será paz y amor, lo cual no es real”, sostuvo la psicoterapeuta de Inppares, María Teresa Marticorena Cerrón.

Entrevistada en el programa Saludable Mente de Andina Canal on line, comentó que existen dos tipos de pareja que buscan ayuda: las que tienen poco tiempo juntas y desean hacer las cosas bien, tener una relación saludable y básicamente son jóvenes. El segundo tipo de pareja es la que ya tiene una relación de larga data, muchos problemas y ve la terapia como el último esfuerzo para mantener viva la relación. 

“La terapia de pareja tiene el objetivo de que ambos tengan una relación óptima, saludable y bonita, y también identificar si la pareja está funcionando bien o hay más daño que bien en su interior. Si eso ocurre, la idea es apoyarlos en el proceso de recuperación o, de lo contrario en su separación, para que no sea tan dolorosa”.

Desmitificar el amor romántico


Para la psicoterapeuta, las ideas de amor romántico con las que hemos crecido son generadoras de grandes conflictos en una relación, a la que se suma el machismo.   

“Hay que desmitificar el amor romántico, el 'vivieron felices para siempre', porque no es real. Habrá los conflictos, pero si las discusiones son sanas, no dejarán huella. Los conflictos son una posibilidad de conocernos más, pero hay que ver cómo se manejan. Si vemos que lo podemos superar juntos, va bien; pero si el conflicto me genera más daño y estoy inmerso en una violencia psicológica o física, eso no está bien”.

Muchos suponen -añadió- que la pareja debe conocer todo sobre la otra persona, todo lo que desea, debe aceptar maltratos o creer que su amor solucionará los problemas, todas esas son ideas de un amor romántico que hacen mucho daño.

La experta reconoce que nadie nos enseña a ser ni padres ni pareja, dos aspectos primordiales para nuestro desarrollo y nuestra vida diaria, y por eso aconseja una autoevaluación antes de buscar ayuda especializada. 

“Es importante analizar cómo va nuestra relación. Si la pusiéramos en esas balanzas antiguas, que trabajan con pesas, en un lado colocamos los momentos de bienestar, satisfacción, de amor, de paciencia, tranquilidad, compañerismo, de complicidad y en el otro los momentos de conflicto, de dolor, de maltrato. ¿Cuáles son mayores? Dependerá de eso para saber si vamos o no vamos bien”. 

Consideró fundamental entender que “el amor no basta” para que una relación sea buena o se mantenga en el tiempo. 



“¿Qué los trae a consulta?


La falta de comunicación es la más común y ligera de las razones que trae una pareja a terapia.  La mayoría cree que una comunicación verbal es suficiente. No se comunican bien porque no sabemos transmitir lo que estamos sintiendo, afirmó. 

“Por ejemplo, si la pareja sale y no regresa a tiempo, no es lo mismo decirle cuando llega ‘siento temor y por eso me estoy preocupando más’, a ‘por qué llegas a esta hora, no sabes cómo estoy”.  Nuestra comunicación es distinta si evidencio mi emoción a que responda solo llevado por la emoción”. 

La lucha por el poder, infidelidad, peleas, celos, resentimientos pasados son otras razones que llevan a las parejas a buscar a un terapeuta. Mucho dependerá de la intensidad del problema.

“Si mi lucha por el poder es solo por elegir qué se comerá, es una cosa; pero es distinto a exigir que se cumpla siempre lo que yo deseo. En el segundo caso, alguien siempre pierde, no es escuchado y eso genera toxicidad en la pareja. Esto se agrava cuando hay maltrato físico o psicológico”. 

La experta de Inppares indicó que las discusiones son parte de la pareja y que no siempre ganará la misma persona y eso está bien. Pero si el supuesto perdedor no resigna es mejor que manifieste su fastidio, que no se quede con esa mala emoción dentro, que la comunique.  

“Nosotros venimos como una mochilita dentro. Si está vacía, uno podrá saltar, caminar, bailar, trepar, bajar, hacer de todo. Pero si está más llena, será difícil caminar, trotar, correr, saltar. Cuando hay muchos años de desgaste, conflicto, muchos problemas no resueltos, muchas emociones guardadas, la persona se sentirá más cansada, agotada por el peso”.

Si hay disposición de ambas partes en cambiar aquello que les genera problemas, la terapia de pareja tendrá un buen pronóstico. “Entre el 65% y 70% mejora significativamente su relación”.



Cuando no se recomienda


Para María Teresa Marticorena, la terapia de pareja no es recomendable cuando hay presencia de maltrato físico o psicológico permanente. Tampoco cuando hay infidelidad recurrente. 

“Estamos ante una relación tóxica. Allí se sugiere que la persona maltratadora reciba una terapia especializada, pero de manera individual, porque la violencia inmersa en su interior merece ser tratada y curada. Después que descargue todos sus problemas individuales, podrá ir a terapia de pareja”.

Explicó que es necesario trabajar y entender de dónde viene ese dolor, la ira y la violencia. Podría ser producto de sus modelos parentales o de la experiencia de su primera relación amorosa importante. 

Cuando la relación tiene muchos años de heridas y hay dolores guardados será más difícil recuperar a la pareja. En esos casos, la terapia será el espacio para entender que la relación debe terminar. 

“El vivir en pareja tiene que ser agradable, darnos la sensación de sentirnos amados, queridos y siempre respetados. Si es todo lo contrario hay que verlo con pinzas porque algo no está bien y es mejor buscar ayuda profesional para saber cuál debe ser el siguiente paso”, agregó. 

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(FIN) KGR/RRC

Publicado: 13/2/2020