El Sistema de Alerta Sísmica del Perú (Saspe) emitirá alertas cuando se produzcan movimientos de magnitud 6 a más, pues son los que causan mayor sacudimiento de suelos y daño en las construcciones, aseguró el presidente ejecutivo del Instituto Geofísico del Perú (IGP), Hernando Tavera.
Con 106 sensores instalados a lo largo de la costa, de Tumbes a Tacna, el sistema “tratará de acercarse lo más que se pueda a donde ocurren los terremotos, para alertar a tiempo a la población y ganar segundos valiosos antes de que una localidad sea sacudida por las ondas sísmicas”.
El sistema no predice terremotos –aclaró Tavera–, pero cuando comienza uno, en los primeros tres segundos los sensores podrán calcular el epicentro y la magnitud.
Valor agregado
“Con esa información, estimamos los niveles de aceleración que soportarán los suelos en una determinada localidad –dependiendo de la distancia respecto del epicentro– e inmediatamente damos la alarma a todas las áreas donde creemos que esa aceleración puede ocasionar daño estructural”.
Es momento de que la población empiece a darle valor agregado a la información que provee la tecnología, pues esta puede salvar vidas, enfatizó el titular del IGP, entrevistado en ‘Andina al Día’ de la Agencia Andina.
Las 106 estaciones del Saspe estarán instaladas en diciembre de 2021 en toda la costa peruana. La primera estación del sistema, bautizada con el nombre de Julio Kuroiwa, se inauguró a finales de julio en el Morro Solar, en el distrito limeño de Chorrillos, e incluye sensores sísmicos en las islas San Lorenzo y Hormigas.
Vea aquí la entrevista completa al presidente ejecutivo del IGP, Hernando Tavera, en 'Andina al Día':
Inversión y componentes
El proyecto considera dos años de implementación antes del inicio de operaciones y demanda una inversión del orden de los 40 millones de soles. “Este año estamos ejecutando alrededor de 9 millones en el IGP y algo similar hace el Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci)”, añadió.
“Proyectos de este tipo tienen cuatro componentes, el primero de los cuales es estudiar el peligro, es decir, estimar dónde existe la mayor posibilidad de que se produzca un evento sísmico importante en el país”, comentó Tavera.
Al respecto, manifestó que todas las investigaciones especializadas reportan una alta probabilidad de un sismo importante en la costa central del país.
Por ello, en los próximos meses el IGP trabajará en la colocación de los sensores en Ica, el resto de la región Lima y Áncash, para continuar en el 2021 con Tumbes, Piura, Lambayeque y La Libertad y, en la costa Sur, con Arequipa, Moquegua y Tacna.
El 30 de diciembre del próximo año tendremos todo el Saspe ya operativo, aseguró Tavera, al detallar que la alerta tendrá que diseminarse y llegar a la población a través de un sistema de bocinas, tarea que es responsabilidad del Indeci.
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(FIN) CCH
Publicado: 3/8/2020