Por María Fernández ArribasplataAl sureste de Brasil y rodeada de árboles se encuentra Belo Horizonte, la ciudad elegida para ser la sede del centro de ingeniería de Google en América Latina desde el 2015. Allí trabajan tres talentosos peruanos y sus historias de esfuerzo nos demuestran que nada es imposible.
En sus amplias oficinas, que son el lugar soñado para cualquier empleado en el mundo, trabajan más de 120 ingenieros de distintos países, casi todos enfocados en mejorar uno de los productos más ilustres:
el buscador de Google.
Precisamente esa es la principal función que tiene el cusqueño Edu Sánchez: intentar saber qué es lo que quiere el usuario. Junto a él trabajan dos peruanos más: Maicol Gómez y Javier Palomino Pinchi.
Los tres fueron a las competencias de programación de Google durante su etapa universitaria, y el
gigante tecnológico despertó en ellos su interés por trabajar allí, sin imaginarse que años después lo lograrían y formarían parte de su equipo latinoamericano.
Un cusqueño en Google
Edu Sánchez no sabía si quería trabajar en Google. Él estudió Ingeniería de Sistemas e Informática en la Universidad Nacional San Antonio Abad del Cusco. Cuando egresó tenía claro que su camino era la investigación, así llegó a la Universidad de São Paulo -una de las universidades públicas más grandes de Brasil- para estudiar una maestría y un doctorado.
“Cuando acabé el doctorado vine a trabajar a Google. Primero hice una pasantía de 6 meses y luego pasé a trabajar a tiempo completo. Ya tengo un año y medio aquí y mi trabajo es mejorar el ránking de las páginas, así como la experiencia del usuario”, refiere Sánchez, ingeniero de software de 32 años.
Si se imaginan que Edu y sus compañeros son como robots, haciendo puro código o programando, se equivocan. Él explica que se hace investigación y por eso decidió quedarse. Las mejoras que hay en el motor de búsqueda están a cargo de otro grupo de ingenieros en este centro. No todo lo novedoso o sorprendente tiene que venir de las oficinas de Estados Unidos, precisa.
De la UNI a Google
Hace cuatro años Maicol Gómez Zegarra llegó a Brasil. Él tiene 30 años, nació en Lima y estudió ingeniería de sistemas en la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI). Sus ganas por aprender más lo llevaron a estudiar una maestría en la Universidad Pública de Campinas (UNICAMP) en Sao Paulo. Cuando acabó ingresó a trabajar en Google como ingeniero de software.
Ya tiene seis meses y
su trabajo es promover el uso del asistente de Google en todo el mundo. Gracias a la labor diaria de ingenieros como Maicol Gómez, este producto está listo para ayudar a los usuarios en cualquier momento o cualquier lugar, solo debe pedírselo.
“Yo sí seguí una ruta para trabajar aquí. Aplique a Google en Brasil, pasé las entrevistas y ya tengo seis meses trabajando. Me gusta ver que las cosas que se hacen en el centro de ingeniería impactan en millones de personas, los usuarios de Google y se ven reflejados en el día a día”, nos cuenta Gómez, integrante del equipo latinoamericano que alcanza el 20%. Con él también se encuentran colombianos y argentinos.
La gran mayoría son brasileños, que representan un 70%, además hay desarrolladores de Europa y Asia.
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“No sabía nada de portugués”
Javier Palomino Pinchi llegó a Brasil apenas acabó la carrera de ingeniería de software en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Él tiene 26 años y es el más joven de los peruanos 'Googlers'. Recuerda que fue un cambio drástico en su vida.
“Saliendo de la universidad vine para trabajar a Google. No sabía nada de portugués, eso me chocó. Poco a poco fui aprendiendo y ahora ya tengo siete meses aquí”, dijo el ingeniero peruano a la Agencia Andina. Palomino también se dedica a mejorar el algoritmo del buscador.
Así como nuestros compatriotas, los demás integrantes del equipo latinoamericano tienen claro que todos ellos tienen la capacidad suficiente para destacar y que el desarrollo de ingeniería no solo viene de California, también de Colombia, Argentina, Brasil y Perú.
Sin embargo, son conscientes que el trabajo conjunto con los equipos de Estados Unidos siempre es necesario. Algunas veces viajan para allá y otras se reúnen a través de videoconferencia.
El trabajo soñado
Así como la sede principal de Google en California, el centro de ingeniería en Belo Horizonte de 4,800 metros cuadrados no solo ofrece recursos de alta tecnología para sus empleados sino también espacios de diversión y relajación.
En sus amplias salas con vista a la ciudad hay libros, una mesa de ping pong, fulbito de mesa, consolas de juegos como PlayStation y hasta una sala de música. Las mascotas de los empleados no podían faltar, es por ello que en una de las paredes han “montado” un collage con las fotos de sus perros y gatos con tiernos mensajes.
La buena comida también está asegurada. La sede de Google de Belo Horizonte cuenta con dos comedores y sus respectivos chefs. Pero todo no es diversión, en los otros dos pisos de esta sede se encuentran distribuidas las áreas de trabajo donde los ingenieros laboran.
Cada vez son más peruanos que llegan a Google. Para muchos es el trabajo soñado y donde todo esfuerzo vale la pena y es bien recompensado.
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(FIN) MFA/SPV
Publicado: 24/11/2019