De los 18 millones de peruanos que conforman la población económicamente activa (PEA), más de 13 millones (72%) se encuentran en empleo informal, es decir, sin regulación laboral para el trabajo que hacen y sin protección social, señaló la red global WIEGO.
Además, refirió que de tener tal vulnerabilidad para la mayoría de nuestra población trabajadora, el alto nivel de informalidad laboral dificulta la adhesión del Perú a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Para poder actuar frente a esta situación, la red global WIEGO sugirió enfocarse en un primer objetivo: el empleo informal urbano.
Sectores
Mencionó que el empleo agropecuario (agricultura, ganadería, pesca y silvicultura) aumenta el total de empleo informal porque en casi su totalidad lo es, y además tiene características de vida muy diferentes.
Retirarlo del análisis permite precisar la relación entre el empleo informal urbano y la pobreza en el mismo ámbito.
"Hay un estrecho vínculo entre estos trabajadores del Perú Urbano, que crean sus propias fuentes de ingresos, y la condición de pobreza, la cual se incrementó en este ámbito territorial desde el covid, duplicándose en el caso de Lima Metropolitana, que alberga un tercio de la población del país", aseveró.
Empleo informal urbano tiene rostro de mujer
Comentó que son varios los factores estructurales que explican esta coincidencia: la mayoría de los trabajadores independientes de empleo informal urbano son mujeres en edad reproductiva, que están cuidando a niños pequeños, o mujeres con tareas de cuidado de adultos mayores o personas con discapacidad.
"Casi la mitad alcanzó como máximo la secundaria incompleta; la proporción de adultos mayores es mucho mayor a la del empleo formal; y acarrean condiciones de mayor vulnerabilidad en general en términos de vivienda, lugar de trabajo, acceso efectivo a servicios de salud, entre otros", acotó.
Sin embargo, el tipo de trabajo que realizan para sostenerse está conllevando obstáculos adicionales para lograr mejoras en ingresos, que en muchos casos vienen del propio Estado.
¿Qué trabajos son?
Los sectores que encabezan el trabajo informal independiente, según estimados realizados con datos ENAHO 2024, son comerciantes de vía pública (1.2 millones), trabajadores en domicilio dedicados a comercio (1 millón), trabajadoras del hogar (casi 400 mil) y mercados (350 mil).
Se explicó que la falta de crédito, la vulneración constante de los espacios donde se labora y la consecuente pérdida del capital de trabajo, la inseguridad, la falta de acompañamiento técnico para lograr mejores condiciones de trabajo, la escasez de centros de cuidado infantil y de adulto mayor, el golpe del calor extremo en verano, la falta de cumplimiento de normas, y el retroceso que significó el impacto de la covid-19 en este mayoritario segmento del empleo, dificultan que el trabajador independiente y las trabajadoras del hogar puedan ver mejorar su situación.
“No se logra dar el salto en productividad, competitividad y mejora de ingresos necesarios”, señaló la representante de WIEGO en Perú, Carmen Roca.
En este sentido, recordó que los partidos políticos tienen hasta el 23 de diciembre para presentar sus planes de gobierno.
"Pero no se está abordando la aumentada pobreza urbana entre los casi 5 millones de trabajadores autoempleados y trabajadoras del hogar de empleo informal", dijo.
Estudio en Lima Metropolitana
Dado el importante rol del sector comercio en el empleo, WIEGO presentó los resultados de un estudio que realizó entre 1,000 comerciantes de vía pública (mercados en la calle “paraditas") de 10 distritos de Lima Metropolitana.
La investigación es parte de un estudio global en áreas urbanas que incluyó a Bangkok en Tailandia, Delhi en India, y varias ciudades de Brasil.
De los encuestados, 70% son mujeres, 87% tiene tareas de cuidado de otros, 23% son adultos mayores, 19% son jóvenes. “Llama la atención que el 70% tiene a más de tres personas que dependen de sus ingresos diarios”, detalló.
La venta de alimentos perecibles es el giro para más de la mitad de los encuestados, confirmando el rol de las paraditas en la seguridad alimentaria de los pobladores pobres. Más del 20% indicó haber iniciado este trabajo hace 4 años o menos, coincidiendo con la pandemia.
Enfoque de expertos
En el taller “Pobreza urbana y empleo informal en período electoral” participaron destacados especialistas para comentar lo presentado por WIEGO y advirtieron por qué esta problemática debería ser incluida en los planes de gobierno de los comicios generales del 2026.
Al tiempo de indicar que la informalidad laboral constituye uno de los problemas estructurales que enfrenta nuestro país y que la pandemia de la covid-19 la agudizó, el experto en empleo de GRADE, Miguel Jaramillo, apuntó que el cercano panorama electoral ofrece una gran oportunidad para preguntarnos ¿qué podemos esperar del poder político?
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(FIN) NDP/SDD