La oficina de la Defensoría del Pueblo en Huancavelica recomendó a la Dirección Regional de Salud (Diresa) cumplir la vigilancia de la calidad del agua para consumo humano en los sistemas de abastecimiento de los distritos y centros poblados, a fin de proteger la salud y el derecho humano al agua de la población.
La Diresa Huancavelica informó que en enero se vigilaron 1,451 sistemas de agua y 638 cumplían con niveles adecuados de cloración del agua. En febrero y marzo se hizo lo propio cada mes en 1,482 sistemas de agua y se detectó una cloración permanente en 513 y 398 sistemas de agua, respectivamente.
En abril solo en 299 sistemas de agua se cumplió con la cloración continua; esta situación evidencia que en Huancavelica mes a mes se reduce el nivel de cloración de agua.
La oficina defensorial hizo el requerimiento tras supervisiones en las municipalidades distritales de Acobamba, Andabamba, Anta, Caja, Marcas, Paucará, Huando, Acoria, Acobambilla, Manta, Anchonga, Callanmarca, Ccochaccasa, Chincho, Congalla, Huanca Huanca, Julcamarca, Antaparco, Santo Tomás de Pata y Secclla.
Supervisión
Se entrevistó a los responsables de las áreas técnicas municipales (ATM) para conocer su capacidad logística, la disponibilidad de recursos humanos y el nivel de capacitación para cumplir con la vigilancia en los sistemas de agua.
Como resultado de la supervisión, 16 responsables de las ATM informaron que hacen coordinaciones con el área de salud ambiental de los establecimientos de salud para desarrollar el monitoreo de la calidad del agua, en tanto otras cuatro ATM no articulan trabajo alguno.
Asimismo, ocho responsables indicaron que reciben cada mes, aunque de manera parcial, el reporte de vigilancia de la calidad de agua del sector Salud; y 12 de ellos revelaron que no lo recibieron durante enero, febrero y marzo de este año.
Antecedente
En 2019 y 2020, en una supervisión defensorial a establecimientos de salud de las provincias de Churcampa, Acobamba, Huaytará y Tayacaja, se advirtió el poco compromiso de los responsables de salud ambiental para cumplir la vigilancia permanente de la calidad de agua.
Además, se detectó que las instituciones prestadoras de servicios de salud (Ipress) cuentan con equipos inoperativos u obsoletos, situación que dificulta la determinación del cloro residual y un monitoreo eficiente.
La Defensoría del Pueblo recomendó a la Diresa Huancavelica que destine un presupuesto suficiente para garantizar la vigilancia de la calidad del agua; y que exhorte a los responsables de salud ambiental de los establecimientos de salud a fortalecer las acciones de monitoreo, supervisión, fiscalización y vigilancia del recurso abastecido por la empresa prestadora del servicio, las juntas administradoras de servicios de saneamiento (JASS), organizaciones comunales y demás operadores.