Las sagradas imágenes de San Antonio Abad con su cerdito y Santa Bárbara, que forman parte de las 15 esculturas que salen en procesión durante el tradicional Corpus Christi Cusqueño, ya se encuentran listas para esta actividad religiosa, tras los procesos de restauración a las que fueron sometidas.
Las esculturas que datan del siglo XVIII fueron llevadas al Taller de Restauración de Tipón, de la Dirección de Cultura de Cusco, tras presentar deterioro y daños, como el que sufrió San Antonio Abad con un cable de telefonía ocurrido el 17 de enero en la calle Saphy.

Edson La Torre Sotomayor, jefe del centro de restauración, informó a la Agencia Andina que las afectaciones eran visibles tras el accidente involuntario por el cable tendido “tuvo una fisura en el cuello que ha dañado la parte estructural y algunas partes de la volumetría”, dijo.
En el caso de Santa Bárbara, los especialistas evidenciaron daños por la “mala maniobra” durante las procesiones “los aretes de gran tamaño han ido raspando las mejillas de la imagen”, dijo al destacar que se tuvo, en ambas esculturas, 29 procesos para su restauración, como el haber pasado por los laboratorios fotográficos, físico químicos y otros.
Al igual que estas imágenes, también fueron sometidas a restauración las de la Virgen de La Natividad, su Niño Jesús, ángel docelero y el killkito provenientes del templo colonial Nuestra Señora de la Natividad de Chinchero, provincia de Urubamba; y la Virgen del Rosario y el Niño que corresponden al templo de San Sebastián Cusco.

También se restauró, integralmente, las imágenes de Santa Bárbara y San Isidro Labrador que corresponden al templo Virgen María de la O de Yucay, provincia de Urubamba.
“En el caso de la Virgen de La Natividad es la primera vez que se interviene, la imagen tenía bastante acumulación de polvo y mugre al no ser intervenida muchos años. Había ciertas fisuras, lo que se ha hecho es recuperar su volumetría, la parte estética que es la policromía”, agregó.
Jorge Moya Cohaguila, director de Cultura de Cusco, fue quien hizo la entrega de las imágenes a autoridades políticas, representantes de la iglesia católica, hermandades, danzarines y fieles que llegaron hasta el taller adecuado en la Casa del Marqués de Valleumbroso, en la provincia de Quispicanchi.

El funcionario exhortó al cuidado, la preservación y conservación de las sagradas imágenes durante las actividades festivas y procesiones “El llamado es a todos, a las hermandades para que tengan cuidado, porque son piezas únicas, son Patrimonio Cultural de la Nación y ellos están en la responsabilidad de cuidarlas”.
Las celebraciones del Corpus Christi Cusqueño se desarrollarán el 18 y 19 de junio: la Entrada se realizará el miércoles 18, el jueves 19 será el Día central y el jueves 26 la Octava. Las vírgenes y santos saldrán en procesión por el perímetro de la plaza mayor con la carroza de plata y la custodia por delante.

Aquellos días habrá música y danzas típicas de la región durante el desplazamiento desde sus templos coloniales, algunos alejados como San Jerónimo desde su distrito, ubicado al sur de la ciudad del Cusco y Santa Bárbara que lo hará desde el distrito de Poroy, norte de la ciudad, por el Qhapaq Ñan.