Claudia Suárez, nunca imaginó que, a los 51 años, la vida le diera la oportunidad de probar el dulce sabor de la fama. Los saludos hacía ella no quedan solo en cordialidad, ahora se ha sumado una admiración que todo aquel que se la cruce por el camino, quiera guardar ese momento con una foto o un abrazo de felicitaciones.
Ello ha logrado, tras ganar la medalla de oro en frontón de los
Juegos Panamericanos Lima 2019, pasar a la historia de nuestro deporte, saliendo de ese anonimato que no permitió que el Perú conociera más de ella. Hay que agradecer al destino que su papá,
Claudio Suárez le diera cuando ella solo tenía cinco años una paleta para que se dedicara a este deporte y lo comience a practicar en la playa
La Herradura.
La deportista nacional llega feliz al club La Encantada Villa, donde por la tarde brinda clases a niños squash y frontón. Carga diversos maletines, que están llenas de raquetas y pelotas, pero que no le impiden levantar la mano para responder el saludo con una sonrisa.
"Es emocionante que todos te reconozcan, pero todavía no me acostumbro. La gente me saluda dentro del club, en la calle, parece que han estado pendiente de los juegos y los resultados de todos los deportes y de todo nuestro equipo donde han sido casi 600 deportistas. Ganar medallas en nuestra casa fue muy emocionante", señaló Suárez.
La 20 veces campeona nacional de manera consecutiva, describió como está viviendo este momento deportivo. "Muy contenta por haber llegado a este punto con el frontón que es un deporte nacido en el Perú y hemos venido trabajando en esto durante años, con las federaciones anteriores de los años 90 para lograr internacionalizarlo y hemos dado un gran paso para ello".
" Tanto Kevin (Martínez) ganamos en frontón en unos
Juegos Panamericanos, y que la medalla de oro quede en casa es más importante todavía. Somos los embajadores de este deporte", resaltó.
" Lo que queremos ahora es seguir difundiendo el frontón. Además que las mujeres vean en mí que se puede lograr todo lo uno se proponga y que se puede compartir el tiempo con la familia, los hijos y otro tipo de actividades que tienen las personas", señaló Claudia Suárez, quien es mamá de Matías, quien tiene 15 años.
El gran sacrificio de la campeona
Claudia Suárez por 35 años se ha dedicado al deporte. Para estar en la élite del deporte ha tenido que sacrificar muchas cosas en su vida. " Si he tenido que dejar unas cosas de lado y creo que lo más importante es el tiempo que a veces no le puedo dedicar a mi hijo. Hay momentos en que he tenido que viajar y solo hemos podido conversar por teléfono y se ha ido acostumbrando, igual extraña, él ha cumplido 15 años pero desde que nació ha visto a su mamá dentro de las canchas, preparándome".
Claudia resalta que las salidas nocturnas no han sido una prioridad en su vida, porque siempre hizo prevalecer el descanso y el deporte.
Luego que nuestra campeona terminara el colegio, trabajó en una agencia de viajes, debido que en ese entonces no había apoyo para el deporte. Estudió diseño gráfico publicitario, aviación comercial y turismo, pero ninguna pudo arrebatarle el amor por el deporte.
"Tengo entendido que el apoyo al deportista va a seguir y espero que no quede en palabras. Yo seguiré enseñando a los chicos y deseo que muy pronto uno de ellos también obtengan una medalla. Para fortuna tenemos el apoyo de la Federación y del Instituto Peruana del Deporte (IPD) que nos permite tener entrenadores, médicos, fisioterapeutas, siempre están pendientes si algo nos duele para solucionarlo", refirió.
Pedro Paulet
Por las venas de Claudia Suárez, también recorre el éxito. El bisabuelo de esta deportista es Pedro Paulet, el padre de la astronáutica.
" Tengo el orgullo que mi bisabuelo sea Pedro Paulet Mostajo, sabio peruano. Yo no soy sabia (risas) pero hice lo mejor que pude en el deporte y lo logré y no creo que haya defraudado a mi familia", dijo.
Si Claudia, no has defraudado ni a tu familia, ni al país ( Por Marco Coello).
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Publicado: 16/8/2019