Cepal: Perú se desmarca del bajo crecimiento económico regional

Destaca su dinámica y capacidad de resiliencia

Las inversiones en actividades productivas y de infraestructura son más atractivas en países como el Perú. ANDINA/Ricardo Cuba

Las inversiones en actividades productivas y de infraestructura son más atractivas en países como el Perú. ANDINA/Ricardo Cuba

08:30 | Lima, ago. 11.

Por William Rios Rosales

En un escenario de baja expansión para la región (2.2%), el dinamismo de Perú, que crecería 3.1%, lo posiciona como referente en América Latina y el Caribe.

Cuando miramos el panorama económico de América Latina y el Caribe para este año, observamos un cuadro no del todo alentador. La región se encuentra en un ciclo de crecimiento lento, de esos que a veces se sienten un poco estancados. 

De acuerdo con el reciente informe de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), el crecimiento promedio de la región se quedará en un modesto 2.2%. Es un número que nos habla de un escenario lleno de retos, con una demanda internacional un poco apagada y condiciones financieras que no son precisamente las más fáciles. 




Pero, como en toda historia, siempre hay un personaje que destaca, que se sale del guion. Y en esta ocasión, ese personaje es, sin duda, Perú, según el “Estudio económico de América Latina y el Caribe 2025” de la entidad multilateral, señala artículo publicado en el Suplemento Económica del Diario El Peruano.

Dinamismo


El país no solo está nadando contra la corriente, sino que lo está haciendo con una fuerza admirable. Las proyecciones indican que la economía peruana crecerá un robusto 3.1% este año, una cifra que, si la ponemos en perspectiva, supera con creces el promedio regional. 

Esto no es un simple detalle, es una señal poderosa, Perú se está consolidando como una de las economías más dinámicas y resilientes de toda la región, un auténtico faro de esperanza en un mar de incertidumbre. La clave de este impulso reside en la minería, que sigue siendo el motor principal de la economía. 

Las inversiones en este sector están más fuertes que nunca, y a eso se suma una demanda interna que se mantiene activa, demostrando que los peruanos siguen confiando y moviendo la economía. 

El informe de la Cepal valida esta tendencia, dándonos la confianza de que el camino de crecimiento de Perú es firme y tiene bases sólidas.

Un vistazo a la vecindad


El 2.2% de crecimiento promedio que mencionamos esconde un mosaico de realidades. No todos los países avanzan al mismo ritmo, y cada uno tiene su historia que contar. 

Por ejemplo, mientras algunos países se esfuerzan por mantener el paso, otros están protagonizando recuperaciones espectaculares. Argentina es un claro ejemplo de esto. Tras un período de recesión, se proyecta que su economía se dispare con un impresionante 5%, el crecimiento más alto de la región. Le sigue de cerca Panamá, que con su estratégica posición y su vitalidad comercial, podría alcanzar un crecimiento del 4.2%.

Pero hay más buenas noticias. Paraguay (4%), República Dominicana (3.7%), Guatemala (3.6%) y Costa Rica (3.5%) también se perfilan como economías con un desempeño muy por encima de la media. Y no podemos olvidar a Honduras (3.2%) y Nicaragua (3.1%), que se suman a la lista de naciones que le están poniendo dinamismo a la región.

Ahora, ¿qué pasa con los gigantes? Las economías más grandes de la región, como México y Brasil, tendrán un crecimiento más discreto. 

Se espera que México apenas roce el 0.3%, un ritmo lento influenciado por una demanda externa debilitada y la incertidumbre en sus relaciones comerciales. Brasil, por su parte, crecerá un moderado 2.0%, un avance que refleja los desafíos de manejar altas tasas de interés y ciertas dudas políticas.  Si miramos a Chile, su crecimiento se alinea justo con el promedio regional, con un 2.2%, gracias a las inversiones en minería y una demanda interna que se está recuperando. Para Colombia se espera que avance un 2.5% y Uruguay, un 2.8%.

Perspectivas


El informe de la Cepal es más que una simple lista de números; es una llamada de atención. Nos advierte que el futuro económico, tanto para 2025 como para 2026, está lleno de grandes interrogantes. 

Los riesgos globales, si se intensifican, podrían frenar aún más el crecimiento de la región. Además, nos recuerda que, si bien la inflación regional parece estar bajo control, no podemos bajar la guardia, ya que las presiones inflacionarias siguen latentes. 

Y en el tema del empleo, aunque no se espera un gran repunte, la buena noticia es que los niveles de desempleo se mantendrán relativamente estables. Para la subregión de América del Sur, el futuro parece un poco más brillante, con una expansión proyectada del 2.7%, superando el promedio general. 

Este impulso viene de la mano de la recuperación en países clave y de una dinámica positiva en naciones como Paraguay. Mientras tanto, en México y Centroamérica el panorama es más cauteloso, con un crecimiento del 1.0%, principalmente debido a la desaceleración de la economía de Estados Unidos, que es su principal socio comercial.

El Caribe, excluyendo a Guyana, crecerá un 1.8%, también afectado por la menor actividad en el país vecino del norte y la consecuente caída en la demanda de turismo.

El mensaje más importante de la Cepal es una invitación a la acción. El informe nos insta a no quedarnos de brazos cruzados. Nos anima a movilizar recursos financieros, a fortalecer nuestra estabilidad económica y a seguir avanzando hacia un modelo de desarrollo que sea más productivo, inclusivo y sostenible. 

La colaboración entre las instituciones financieras de la región es vista como un paso crucial para lograr estos objetivos.

Solidez


Aunque el escenario económico de América Latina y el Caribe presenta su cuota de desafíos, la historia de Perú nos da motivos para el optimismo.  




Su sólida proyección de crecimiento de 3.1% lo sitúa en una posición de liderazgo y demuestra la resiliencia de su economía. Este éxito no solo es una buena noticia para los peruanos, sino que también sirve de ejemplo para toda la región. 

El informe nos enseña que el camino hacia la prosperidad está en la prudencia fiscal, en la reforma estructural y, sobre todo, en la capacidad de mirar hacia adelante con una visión de crecimiento equitativo y sostenible.

Capitales


- Para este año, Cepal prevé que aumenten las entradas netas de capital, si bien a un ritmo más lento. 

- Durante el primer trimestre, la cuenta financiera acumulada entre Brasil, Chile, México y Perú presenta un saldo deudor con el resto del mundo de 35,000 millones de dólares, una reducción del 17% respecto al mismo período del 2024. 

- Esto se debe a la disminución de las entradas de IED en todos los países, salvo Perú, y de inversión en cartera, especialmente en Brasil.

- Las cifras para el primer trimestre del 2025 apuntan a una continuidad en la tendencia observada el 2024, con mejoras en los términos de intercambio en Brasil (3%), Argentina (7%), Colombia (8%) y Perú (17%). Sin embargo, Chile (-3%) y México (-6%) registran un deterioro.

Más en Andina:



(FIN) DOP/SDD


Publicado: 11/8/2025