La cifra de mineros que murieron tras una avalancha que arrasó un campamento en el noroeste de Colombia subió a 12, según un nuevo balance de autoridades locales, que dieron cuenta de dos desaparecidos.
Al caer la tarde del miércoles, los trabajadores fueron sorprendidos por la crecida súbita de un arroyo en el municipio de Abriaquí, en el departamento de Antioquia.
"Tenemos 12 cuerpos rescatados sin vida (...) y aún tenemos dos desaparecidos", dijo a la AFP el alcalde de esa población, Héctor Urrego.
Más temprano, la estatal Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd) había informado sobre 10 fallecidos. Situada en un área montañosa, la mina de oro operaba legalmente, según Urrego.
"Estaban los muchachos en la cena, algunos se disponían a descansar, otros ya salían del trabajo cuando (llegó) la torrencial, la avalancha", relató el mandatario al canal Teleantioquia.
Según los reportes oficiales, el aluvión destruyó el campamento y parte de la planta de la mina El Porvenir. Los rescatistas suspendieron sus labores de búsqueda de los dos desaparecidos hasta la mañana del viernes debido a malas condiciones climáticas.
"Invierno implacable"
En un mensaje en Twitter, el presidente Iván Duque expresó su "solidaridad con las familias de las víctimas". "Los organismos de socorro trabajan (...) en operaciones de búsqueda de desaparecidos", indicó el mandatario.
Con la tragedia del miércoles, ya son 19 los fallecidos en Antioquia durante la primera temporada de lluvias del año, que se extenderá hasta junio, según autoridades locales.
Unas horas antes, una mujer de 48 años perdió la vida en un deslizamiento de tierra provocado por las precipitaciones en el vecino municipio de Barbosa.
"Llevamos varias semanas donde el invierno ha sido implacable (...) En una vereda cercana, Santa Teresa, se tiene otra amenaza de avalancha. Hicimos evacuar las viviendas y estamos esperando que no pase nada grave", lamentó el alcalde de Abriaquí, quien dio un balance de al menos 20 familias desplazadas ante el riesgo de otro desastre.
Según Urrego, varios ríos próximos al poblado están en riesgo de desbordarse y las vías que llevan a las zonas rurales sufren afectaciones por otros deslizamientos.