Desde hace doce semanas, se observa la reducción sostenida del número de fallecidos y contagios con el nuevo coronavirus en la región Áncash, afirmó hoy el jefe de Epidemiología de la Dirección Regional de Salud (Diresa), Jaime Salazar.
Remarcó que en abril, cuando se experimentó el pico más alto de la segunda ola de la pandemia en Áncash, se registraron hasta 40 muertes diarias. Actualmente el número de fallecidos diarios no sobrepasa los cinco y ha habido días con un deceso.
Con respecto a los contagios, antes se detectaban entre 200 a 250 diarios, y ahora la cifra ha caído a 25 nuevos casos por día, señaló el especialista.
“La disminución de casos y defunciones es considerable si lo comparamos con el pico más alto, que fue en abril”, enfatizó Salazar.
No bajar la guardia
En opinión del funcionario, la situación que atraviesa la pandemia en Áncash se puede deber a las campañas de vacunación, así como al cumplimiento estricto de protocolos por parte de la ciudadanía.
Sin embargo, debido a la circulación de nuevas variantes de la
covid-19 y la gran cantidad de personas que aún no han sido vacunadas, el jefe de Epidemiología de la Diresa pidió a la población no bajar la guardia y seguir cuidándose.
Lamentó el comportamiento de algunos pobladores, como el pasado 29 de junio, día central de la fiesta patronal de San Pedrito, en el que se observaron aglomeraciones en el centro de la ciudad de Chimbote.
“Es nuestra responsabilidad [de los ciudadanos] evitar la ocurrencia de una nueva ola pandémica y evitar más contagios y muertes por el covid-19”, puntualizó Salazar.
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