Valle de las Pirámides: ¿Dónde se ubica y qué cultura construyó estas edificaciones?

Conoce cómo llegar a este notable atractivo turístico peruano y qué otras culturas construyeron pirámides en Perú

ANDINA/Difusión

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09:15 | Lima, set. 20.

El Valle de las Pirámides es uno de los atractivos turísticos más importantes del Perú y uno de los espacios de investigación arqueológica de gran actividad que siguen evidenciando el alto nivel de desarrollo alcanzado por los antiguos peruanos. ¿Dónde se ubica y qué cultura construyó estas notables edificaciones?, ¿Qué función cumplieron?, ¿Cómo llegar allí?, ¿Qué otras culturas construyeron pirámides en Perú?

Ubicación del Valle de las Pirámides


El Valle de las Pirámides de Túcume se encuentra en la parte baja del valle del río La Leche, a 33 kilómetros al norte de la ciudad de Chiclayo, en el departamento de Lambayeque. Está conformado por más de veinte estructuras hechas con adobes, distribuidas en un área de 221.5 kilómetros cuadrados.


Conocido también como Cerro La Raya o Cerro Purgatorio, este sitio arqueológico constituye la expresión arquitectónica monumental más tardía del desarrollo cultural prehispánico en la región Lambayeque. 

¿Qué cultura prehispánica construyó las pirámides?


La construcción de las pirámides se remonta al año 1,000 después de Cristo, durante el auge de la cultura Lambayeque, también conocida como cultura Sicán, que en ese entonces ocupaba lo que hoy es el Santuario Histórico Bosque de Pómac.


Sin embargo, su uso continuó muchos siglos después, durante la expansión del reino Chimú y el imperio Inca que anexaron a sus dominios el territorio del actual departamento de Lambayeque. El Valle de las Pirámides fue abandonado poco antes de la llegada al Perú de los conquistadores españoles, en 1532. Durante estos siglos de ocupación, Túcume pasó a ser no solo un centro religioso, sino también un punto estratégico para el control político, administrativo y económico de la región.



¿Qué funcionamiento tuvieron las pirámides?


Las pirámides de Túcume cumplieron diversas funciones, actuando como centros de poder político, religioso, administrativo y económico para la antigua cultura Lambayeque o Sicán, el reino Chimú y el imperio Inca. 


Sirvieron como templos ceremoniales, residencias para la élite gobernante, lugares para actividades artesanales y rituales importantes, incluyendo sacrificios humanos y de animales.

¿Cómo era la estructura de las pirámides y cuáles eran las más notables?


A diferencia de las pirámides egipcias, las del Valle de Túcume son pirámides truncas. Esto significa que no culminan en una punta, sino que están formadas por grandes plataformas superpuestas, sobre las que se erigían templos y otros edificios.  


La pirámide más grande se llama Huaca Larga, que se extiende a lo largo de 700 metros de largo, 270 metros de ancho y 30 metros de altura. Esta gigantesca estructura es solo una de las muchas que conforman el complejo, que alberga al menos 26 pirámides más, entre ellas las huacas Los Gavilanes, Las Abejas, Facho, entre otras, cada una con su propia historia que contar. 



Investigación arqueológica


Las investigaciones científicas en el Valle de las Pirámides están a cargo del Proyecto Arqueológico Túcume, que comenzó en 1989 y que culminó en una primera etapa en 1994, para luego retomar en 2004 y continuar sin pausa hasta la actualidad. Durante este tiempo, los arqueólogos han descubierto una gran cantidad de artefactos y evidencias que nos permiten entender mejor la vida en este sitio arqueológico.


Entre los hallazgos más significativos se encuentran murales y relieves, que, aunque hoy lucen monocromáticos y algo deteriorados, nos hablan de la cosmovisión de sus habitantes, sus dioses y sus creencias.

Atractivo turístico de gran importancia


En la actualidad, Túcume se ha convertido en uno de los sitios arqueológicos más grandes de América y es un destino turístico de gran relevancia. Las pirámides ofrecen a los visitantes una oportunidad única de viajar al pasado, de caminar por las mismas rutas que recorrieron los grandes líderes de las culturas preincaicas.


No solo es un lugar para los amantes de la arqueología, sino también para todos aquellos que deseen conectarse con las raíces profundas de la historia peruana. Recorrer este complejo es una experiencia que no solo permite maravillarse con sus estructuras y edificaciones, sino que también se puede disfrutar de un entorno natural increíble, que ha sido testigo de este fascinante legado por siglos.


Visitar este sitio es una forma de rendir homenaje a nuestros antepasados que, con su sabiduría y esfuerzo, dejaron un legado que, hasta el día de hoy, nos asombra.



¿Cómo llegar al Valle de las Pirámides?


Para llegar a este notable destino primero hay que viajar a la ciudad de Chiclayo. Desde la ciudad de Lima se puede acceder por vía terrestre en un trayecto que demanda 13 horas en promedio. Por vía aérea el vuelo entre los aeropuertos Jorge Chávez, del Callao, y Capitán FAP José Abelardo Quiñones González, de Chiclayo, dura una hora y 25 minutos. 


Al llegar a Chiclayo hay que dirigirse al distrito de Túcume en transporte público o particular y recorrer 34.6 kilómetros. Ya en Túcume se puede abordar un vehículo colectivo o seguir avanzando en auto privado para alcanzar, en alrededor de 15 minutos, el ingreso al Valle de las Pirámides.

Otras culturas que construyeron pirámides en Perú


Si bien el Valle de las Pirámides constituye uno de los espacios de mayor concentración de pirámides en todo el Perú, no es el único lugar donde se construyeron ni la cultura Lambayeque es la única que edificó este tipo de edificaciones monumentales.


Hace más de 5,000 años, la civilización Caral, la más antigua del continente americano, construyó una enorme pirámide monumental, comparable a las pirámides de los antiguos egipcios. Las investigaciones arqueológicas revelan que fue construida 500 años antes de la pirámide de Giza.


Los arqueólogos han encontrado pirámides de diferentes tamaños en Caral, construidas con adobes. Hay siete grandes pirámides en Caral rodeadas por varias estructuras más pequeñas, que suman un total de 32 edificios. Cada pirámide en Caral tiene diferentes usos según el orden social y religioso de las personas que vivieron en esa época.


La cultura Moche también destaca por sus grandes pirámides, siendo las más notables las huacas del Sol y la Luna, ubicadas en la provincia de Trujillo, departamento de La Libertad.


También destaca la cultura Chimú, que construyó la pirámide conocida como huaca Paramonga o “La fortaleza”, erigida en Barranca, la provincia más septentrional del departamento de Lima. 


Nasca es otra cultura preínca que construyó pirámides, siendo Cahuachi, en la región Ica, territorio donde surgió y se desarrolló esta antigua cultura peruana, el sitio arqueológico donde se puede apreciar este tipo de monumentos de carácter ceremonial.


La cultura Lima, que se desarrolló en el periodo de los desarrollos regionales (200-700 d. C.) en parte del territorio que ocupa la actual ciudad de Lima Metropolitana, construyó pirámides siendo una de las que se conservan mejor la llamada huaca Pucllana, ubicada en el distrito de Miraflores, que tiene 25 metros de altura y que está rodeada por un conjunto de patios, plazas y recintos al noreste de esta edificación ceremonial.


Otras pirámides importantes en la ciudad de Lima son las huacas Mateo Salado y Puruchuco, construidas por la cultura Ichma, que surgió en el periodo Intermedio Tardío (900-1450 d.C.); la huaca Huallamarca, una gran pirámide escalonada de 25 metros de altura cuya edificación se vincula con la cultura Chancay.


(FIN) LZD/MAO


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Publicado: 20/9/2025