06:49 | Trujillo, set. 14.
En menos de nueve meses, la ciudad de Trujillo, capital de la región La Libertad, tendría un nuevo alcalde, si es que el pleno de regidores decide hoy suspender a César Arturo Fernández, sobre quien pesa una sentencia en segunda instancia a un año de pena privativa de libertad por el delito de difamación agravada.
La
sesión extraordinaria ha sido convocada a las 10:00 horas y se espera la asistencia de los 15 regidores del concejo provincial de Trujillo, quienes finalmente votarán por la
solicitud de suspensión hecha por el ciudadano Andree Farek Gallo Lezama.
No obstante, se han presentado dos solicitudes de vacancia, luego de que la sala penal rechazara el recurso de casación presentado por la defensa de
César Arturo Fernández Bazán, por carecer de fundamentos de derecho para que su caso sea visto en la Corte Suprema.
Como consecuencia de ello, el Quinto Juzgado Unipersonal de la Corte Superior de Justicia de La Libertad declaró consentida la sentencia en el extremo de la reparación civil de 50,000 soles a favor de la agraviada, pues el alcalde César Fernández decidió abonar los primeros 5,000 soles iniciales.
El primer regidor Mario Reyna, a quien Arturo Fernández ha acusado de traidor y de haberse beneficiado de servicios en la municipalidad distrital de Moche, será quien asuma la alcaldía si el concejo edilicio decide suspender al actual burgomaestre.
No se arrepiente de nada
Durante las últimas horas, Arturo Fernández se mostró tranquilo y sereno, e incluso se atrevió a declarar ante los periodistas de la ciudad, a quienes ha tildado de "mermeleros, corruptos y de ser aliados del gobernador César Acuña".
“Ustedes piensan que el futuro lo decide un tema político, mi objetivo es otro. Como alcalde, como médico, como hijo, padre, primo, vecino no estoy preocupado por lo que va a pasar mañana, mi tema es el presente”, declaró a los medios.
No obstante afirmó que solo Dios sabe lo que va a pasar en el futuro, pero no descartó apelar la decisión del concejo en caso de que decidan su suspensión.
Asimismo, Arturo Fernández aseguró que no se arrepiente de nada, ni siquiera de los insultos lanzados a los vecinos que no comulgaban con sus ideas.
“Uno nunca se debe arrepentir de nada en la vida porque todo es un aprendizaje. Yo tengo otra misión en este planeta, la misión no es quedarse en un cargo, aferrarse, decir “yo me voy a quedar”, no, eso es símbolo de soberbia; aquí he venido a cumplir mi labor, sentirme bien conmigo mismo, que mi motivo de vida sea positivo para la ciudadanía. Yo de repente termine por África o cualquier rincón del Perú, y siempre mi misión será positiva que el ciudadano mejore y yo mejore con ello”, sostuvo.
Fernández Bazán descartó que en el futuro vaya a postular al Congreso de la República y afirmó que por ahora no tiene partido político.
Respecto a las obras de la ciudad aseguró que se queda con haber revelado a la población la forma de cómo las anteriores autoridades las han venido gobernando y “robando” el dinero de sus impuestos en perjuicio de la ciudad.
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(FIN) LPZ/MAO
GRM
Publicado: 14/9/2023