Pese a la
tragedia del bus incendiado en Fiori y a pocos días de celebrarse la Semana Santa, en que miles salen de viaje con dirección a otras ciudades, la informalidad en el transporte terrestre interprovincial campea en Lima como si nada hubiera pasado.
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La Agencia Andina recorrió algunos puntos de Lima Norte, donde se registra la mayor cantidad de embarques y desembarques hacia el interior del país, y encontró terminales y paraderos, formales e informales, cuya actividad frecuentemente se desarrolla invadiendo la vía pública.
Se trata en muchos casos de minivanes o colectivos que se dirigen hacia lugares del norte chico como Churín, Huaral, Barranca, entre otros. Estos servicios, que cobran una tarifa mayor con el argumento de que llegarán más rápido a destino, son muy demandados por la población en fechas como
Semana Santa.
En algunos casos, el descaro de los informales llega a tal punto que se detienen por varios minutos en importantes vías rápidas de la ciudad, como la Panamericana Norte, altura de Pro, donde como consecuencia de ello aumenta la congestión vehicular, más aún en horas punta.
350 empresas y 129 terminales
De acuerdo con Luis Quispe Candia, director de Luz Ámbar, en Lima Metropolitana hay
350 empresas de transporte terrestre interprovincial autorizadas por el
Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) para prestar servicio hacia el interior del país. De ese total,
129 tienen terminales o paraderos facultados por la misma entidad.
Otros 21 terminales son totalmente informales al no contar con ningún permiso
. Esta figura precisamente ocurrió con la
empresa Sajy Bus, cuyo bus incendiado el último domingo -en que
17 personas perdieron la vida- se encontraba en una cochera alquilada y sin ninguna acreditación.
La mayoría de estos "terminales" o "paraderos" funciona en cocheras, corralones o patios ubicados en las inmediaciones de Fiori (norte de Lima), Yerbateros (centro) y Atocongo (sur); además, en vías o calles de diferentes distritos de la capital como La Victoria o el Cercado de Lima.
Quispe Candia recordó que actualmente solo se necesitan documentos presentados bajo declaración jurada para obtener una autorización a fin de abrir terminales terrestres, razón por la cual hay demasiados en la capital.
Por este motivo, el lunes último, al acudir a Fiori, el ministro de Transportes, Edmer Trujillo,
anunció que se trabaja en la modificación legal de modo que "no se permitan terminales por cada empresa, porque acaban congestionando a la ciudad".
El experto de Luz Ámbar refirió, no obstante, que si bien la autorización para contar con un terminal es otorgada por el MTC, el permiso de su funcionamiento -si es óptimo o no el lugar- recae en los municipios de cada distrito.
"Los municipios dan el permiso para funcionar como lo hacen con una bodega o botica. Si el local, cochera u otro ambiente no tiene la autorización del ministerio, el municipio debe cerrarlo e impedir que allí opere el transporte informal".
Autos, minivanes, buses...
De acuerdo con un estudio publicado en el 2015 por el Centro de Investigación, Desarrollo y Asesoría del Transporte Terrestre (Cidatt), alrededor de 142 millones de pasajeros entran y salen de Lima Metropolitana al año mediante el transporte interprovincial.
De ese total, más de 87 millones 200,000 lo hacen en transporte formal;
12 millones 600,000, en el transporte informal; y 42 millones, en transporte privado. Otro dato es que
la mayoría de pasajeros que ingresa o sale de Lima en transporte informal se embarca desde la zona norte y centro de la capital.
El auto es el vehículo más empleado en el transporte informal, seguido de la miniván/camioneta rural, microbús, camioneta 4x4, station wagon, ómnibus y, finalmente, camioneta pick up.
Solo tres grandes terminales
Ante esta situación, el gerente general de la
fundación Transitemos, Alfonso Flores, consideró que Lima Metropolitana debería tener solo tres terminales terrestres: uno al norte, otro al centro y un tercero al sur.
Pero, explicó, serán necesarias las "plataformas logísticas"; es decir, espacios donde el transporte pesado descargue sus productos (para luego trasladarlos a los grandes mercados en horarios establecidos) o donde los transportistas puedan descansar.
"El terminal no solo serviría para que la gente se embarque, sino que allí llegarían
Sutran, Indecopi y otros fiscalizadores para verificar si los buses o camiones tienen revisión técnica, SOAT, si hay dos choferes por bus...; es decir, ya no tendrían que acudir a cada terminal o paradero como se hace ahora", añadió en diálogo con la
Agencia Andina.
Flores aconsejó declarar en emergencia el sector transporte y dijo que el MTC no solo debería preocuparse por la infraestructura (pistas, puentes, etc.), a la cual destina el 90 % de su presupuesto, sino por el sistema que está encima. "Es necesario ordenar el sistema, ya que ahora hay un descontrol absoluto por la falta de orden y de personal fiscalizador en todas las instituciones".
El experto aseguró que esto debería hacerse ya, porque la informalidad y el riesgo crecen cada día, al punto de que ahora muchos dueños de minivanes tramitan una licencia turística en Lima; pero a la vez en Ica, Arequipa, Moquegua y Tacna. "La ley les permite hacerlo y por ello muchos salen de Lima y cuando están en otra provincia obtienen la licencia de ese lugar y así compiten con el transporte formal".
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(FIN) RRC/RRC
GRM
Publicado: 3/4/2019