En la región Puno, se ha registrado 54 casos de feminicidio en el periodo 2009-2018, siendo la quinta región con los índices más altos de asesinato de mujeres en manos de sus parejas o exparejas, según reportó la Defensoría del Pueblo.
De acuerdo a esta institución, los casos de violencia de género van en aumento, en lo que del año los Centros de Emergencia Mujer han reportado más de 3,000 casos de
violencia contra la mujer, informó Jacinto Ticona Huamán, responsable de la Oficina Defensorial de Puno.
El informe de la
Defensoría de Pueblo reveló también limitaciones logísticas y la inexistencia de personal capacitado para atender a las víctimas de violencia, en las comisarías de familia de la región del Altiplano.
Otro problema es la falta de celeridad de los procesos sobre casos de
violencia contra la mujer en las fiscalías y juzgados de familia, como el caso de Esperanza Sanizo, que lleva más tres años pidiendo justicia para su hija Bety Candia, asesinada por su pareja, el lamentable suceso ocurrió en noviembre del 2015.
“Tenemos de limitaciones de personal, no es posible que, en la Fiscalía de Familia de Puno, con una población de más de 250 personas solamente tengamos 2 fiscales para atender casos de violencia de género, requerimos mayor presupuesto para contratar personal”, afirmó Judith Contreras Vargas, fiscal superior Civil y Familia.
Frente a esta problemática representantes de diversas instituciones ligadas a esta causa se reunieron para diseñar y elaborar un plan estratégico, que permita facilitar de más presupuesto a las acciones de prevención y sensibilización.
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(FIN) JCB/MAO
Publicado: 26/10/2018