Con garra y fútbol Perú venció hoy por 3-0 a una Bolivia que jamás pudo reaccionar frente a los dirigidos por Ricardo Gareca, quienes salieron a la cancha con el cuchillo entre los dientes, dispuestos a gritarles a los del altiplano que si había una selección mundialista en la cancha, esa selección llevaba la blanquirroja en el pecho.
Para nadie fue sorpresa que los nacionales querían lavarse la cara luego de la dolorosa e inesperada derrota en La Paz (el inicio de dos derrotas consecutivas que nos hundieron en el penúltimo lugar de la tabla). Es así como el “chocolate” tenía que esperar: la idea no era ganar, la idea era aplastar a Bolivia.
A Perú le bastaron solo 7 minutos para gritar el primer gol, y, aunque se lo anularon por posición adelantada, Lapadula se encargó de marcar, al siguiente minuto, su primer gol oficial en las clasificatorias para Catar 2022. Si bien es cierto que esta anotación relajó las ansias, también fue cierto que, para Perú, Bolivia tenía que sentir el peso de la localía.
Es así como, a los 30 minutos, llegó la mayor revancha del día: gol de Cueva. No lo celebró. Pidió silencio con el índice en los labios y no le importó que las más de 10,000 almas en el Estadio Nacional reventaran sus gargantas. Él, con una inmensa bronca chacchando entre sus muelas, jamás sonrió por el gol que lo llevó a la cima de la tabla de goleadores de la selección peruana.
Ocho minutos después, una feliz costumbre: Peña recibe el rebote desde fuera del área y remata. Golazo. A los 38 minutos Perú ya aplastaba por 3-0 a una Bolivia que jamás llegó a entender qué estaba pasando en la cancha.
Perú y el intento de un marcador histórico
Los primeros minutos del segundo tiempo repitieron el monólogo peruano: Lapadula tuvo, por lo menos, dos ocasiones claras de gol. Con tres tantos a favor, cualquier selección responsable, que en cinco días tiene otro partido importante y de visita, hubiese bajado las revoluciones. Pero para Perú tres goles no eran suficientes.
Así lo entendían los jugadores y así lo entendió el técnico: a los 68 minutos todo el José Díaz se puso de pie y no por un gol: Jefferson Farfán ingresó a la cancha. El goleador que más veces le ha anotado a Bolivia.
Y aunque el marcador no se movió, la intención peruana de llegar a un marcador de escándalo fue notoria. Sin embargo, las ganas y el físico no siempre van de la mano. Perú enfrentará a Venezuela en Caracas este martes 16, con la necesidad de llevarse una victoria de visita.
A falta de seis partidos para el fin de las eliminatorias, Perú queda a solo dos puntos de la zona de clasificación directa con claras opciones de seguir soñando con Catar. Aunque, como también es costumbre de nuestra selección, así como nos hace soñar, también nos despierta de mala gana.
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(FIN) LIQ
GRM
Publicado: 11/11/2021