Para el estudio realizado en Colombia se trabajó con personas con la mutación "Paisa" que involucra al gen PSEN1 (presenilina 1), que tiene un importante papel en la degradación de la proteína precursora amiloidea (APP). Esta proteína es importante para a formación del péptido ß-amiloide, principal componente de las placas seniles.
Otra estructura proteica presente en los pacientes con la enfermedad de Alzheimer son los
ovillos neurofibrilares, compuestos por pequeñas fibrillas dentro de las neuronas de los pacientes. Estos ovillos se forman a partir de proteínas conocidas como
tau, que se hiperfosforilan. Este mecanismo es explicado en artículos médicos
como este de la Revista Cubana de Investigaciones Biomédicas.
Estos ovillos también están presentes en pacientes con pacientes con otras enfermedades o síndromes, como la demencia frontotemporal, en donde existen sin la presencia de las placas seniles.
Las mutaciones en el gen PSEN1, vinculadas a la formación de las placas seniles y comunes en la población de Antioquía, son la causa de muchos casos de la enfermedad de Alzheimer hereditaria de inicio precoz. Esta variante se caracteriza por un acelerado deterioro cognitivo que comienza alrededor de los 44 años, señala el estudio publicado en Nature.
La mujer resistente y el camino a un tratamiento
El biólogo celular Joseph Arboleda-Velásquez de la Universidad de Harvard y un equipo de especialistas de diferentes países examinaron a los portadores colombianos de la mutación en el PSEN1, y encontraron a la mujer que mantiene su lucidez a los 73 años.
Las tomografías por emisión de positrones revelaron en ella la presencia elevada de la proteína precursora amiloidea en el cerebro de la mujer, un rasgo típico de la enfermedad.
Sin embargo, se halló una cantidad baja de ovillos neurofibrilares de la proteína tau.
Este hallazgo sugiere que la resistencia de la mujer a la enfermedad se relaciona con algún mecanismo responsable de la agregación y desnaturalización (pérdida de estructura molecular) de la proteína tau.
Los investigadores consideran que el mecanismo está relacionado con la presencia de una mutación en otro gen, el APOE, cuya variante APOECh protegería a las células nerviosas de la absorción de tau.
El equipo propuso incluso una forma artificial de reproducir este mecanismo, abriendo un camino al desarrollo a futuro de medicamentos para combatir el Alzheimer, enfermedad que aún no tiene una cura conocida.
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(FIN) HML/MAM