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Juan Taipe: enfermero, bombero y padre al servicio de los demás [video]

Juan labora desde hace 28 años en el hospital de emergencias Casimiro Ulloa. Foto:  ANDINA/Melina Mejía

Juan labora desde hace 28 años en el hospital de emergencias Casimiro Ulloa. Foto: ANDINA/Melina Mejía

12:09 | Lima, jun. 19.

Juan Carlos Alcalde

Ni el cansancio ni los turnos rotativos ni el covid-19 han sido motivos para que Juan Taipe Rojas decline en su triple ocupación diaria: ser enfermero, bombero y principalmente papá. Este hombre de 55 años celebrará hoy el Día del Padre junto a su esposa y sus dos hijos, Fernando (20) y Jorge (17), a quienes describe como su fuerza para salir adelante. Vea aquí la galería fotográfica

Juan no solo es protagonista en el hospital de emergencias Casimiro Ulloa, donde labora hace 28 años, o en la Benemérita Centenaria Compañía de Bomberos Olaya N° 13, donde es voluntario hace 22 años, sino también en su hogar, en la urbanización San Juan Bautista en Chorrillos, pues sus labores se han complementado para no solo dedicarse a salvar vidas en la ciudad, sino también para proteger a su familia y educar a sus hijos.


El papel como enfermero y bombero ha llevado a Juancito -como lo reconocen las personas más allegadas- a ser un buen padre; sus hijos lo ven como un referente e incluso el menor de ellos quiere ser bombero como él. Su esposa Nancy, por ejemplo, se siente orgullosa de tenerlo en su vida. 

“Mis hijos son una fuente de fortaleza para mí. Yo estoy feliz porque ellos están creciendo y desarrollándose. Su alegría, su mirada y su sonrisa son fortaleza para mí”, dijo a la Agencia Andina.

Juan almorzando con Fernando y Jorge.

Una de sus principales motivaciones es que ellos "lleguen a ser personas de bien" y que puedan servir también a la sociedad desde la función que elijan hacer en la vida, sin importar la profesión.

“Algún día me va a tocar morir, pero el legado que les puedo dejar a mis hijos es que hay que vivir a través de la enseñanza porque el que no vive para servir, no sirve para vivir. Ese es mi lema”, apuntó muy emocionado. 

Considera que ser padre es ayudar a los hijos a lograr sus sueños y a que tengan los recursos necesarios para que conquisten el mundo. “Espero que mis hijos estén orgullosos de mí y vean el esfuerzo que uno hace. Veo su dedicación en los estudios y eso para mí es satisfactorio”, manifestó Juan al agradecer a su familia, su energía.

Vocación de servicio


La vocación de servicio le afloró desde la etapa escolar en el colegio José Olaya Balandra de Chorrillos, donde se desempeñaba en la brigada de la cruz roja. Ahí, en el tiempo de la secundaria, decidió formarse académicamente para ser enfermero. Primero en el Instituto Superior Daniel Alcides Carrión y luego en la Universidad San Martín de Porres. 


“Durante mis estudios superiores ingresé al hospital Casimiro Ulloa; los primeros siete años como técnico en enfermería y luego en el cargo de licenciado en enfermería”, mencionó al recordar que, en una de esas intensas jornadas laborales, le entró el deseo de pertenecer al Cuerpo General de Bomberos


En aquellas largas faenas entre aplicación de medicamentos, monitoreo hemodinámico, supervisión neurológica, entre otros, siempre veía en los pasillos del nosocomio miraflorino a los pacientes referidos por los hombres de rojo, por lo tanto, decidió postular y reafirmar su compromiso social. 

“Ahora soy el tercer oficial y jefe de administración de mi compañía. En un 70% de veces salgo en la ambulancia y en un 30% en la máquina de agua. También me encargo de coordinar el nexo entre la jefatura y las municipalidades. Otra de mis funciones como bombero es atender y estabilizar al paciente y trasladarlo a las instituciones de salud”, describe muy orgulloso.


Para Juan, la Benemérita Centenaria Compañía de Bomberos Olaya N° 13 y el hospital Casimiro Ulloa son como su segunda casa, donde se comparte la amistad durante las actividades, las mismas que lamentablemente tuvieron una pausa obligatoria a inicios del 2021 por el covid-19. "Un momento muy complicado", describe.

Covid-19


Los enfermeros ocuparon un lugar importante en la primera línea de fuego en la lucha contra la pandemia del coronavirus porque no solo ejecutaban las prescripciones de los médicos, sino que también acompañaban en el día a día a los pacientes.  En esa trinchera se encontraba Juan cuando empezó a manifestar los síntomas de la enfermedad. 

“Lamentablemente hice un covid-19 grave. Llegué a UCI, estuve intubado con ventilador y todos los procedimientos invasivos durante más o menos un mes”, confesó tras indicar que se encomendó a Dios en ese difícil periodo.  

Afortunadamente respondió al tratamiento con respiración mecánica y salió de alta el 17 de febrero del 2021, un día inolvidable, pues a su salida lo recogieron su familia y sus hermanos bomberos, quienes lo llevaron a la compañía y luego a su domicilio.

“A partir de mayo del 2021 me reincorporé nuevamente a mis actividades laborales en el hospital Casimiro Ulloa y a partir de diciembre del 2021 me reincorporé a mis actividades bomberiles”, expresó al recordar que una de las enseñanzas que le dejó la enfermedad fue entender que la vida es un regalo de Dios y hay que llevarla bien y dignamente.

Reconocimiento


Antes de despedirse con un apretón de manos, quiso reconocer a todos los padres que trabajan en el sector salud, a esos padres que este domingo trabajará en beneficio de la población.

“Nosotros no tenemos día de descanso. Yo quiero manifestarles a ellos, que pasen un bonito día, sabiendo que estamos cumpliendo una misión que escogimos, que es ser personal de salud”, finalizó Juan Taipe, quien además se desempeña como profesor de prácticas en la escuela profesional de enfermería en la Universidad Católica sede Sapientiae en Monterrico. Un todoterreno.

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(FIN) JAM/LIT
JRA

Video: Día del Padre: Juan Taipe, enfermero y bombero inspirado por el amor a su familia
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Publicado: 19/6/2022