Por: Ítalo VergaraUn equipo de científicos de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM) investiga el potencial que podría tener el uso de anticuerpos monoclonales para el tratamiento del covid-19. El proyecto está aún en fase de desarrollo, pero se espera culminar los estudios preliminares en roedores durante el próximo año.
En diálogo con la
agencia Andina, la Dra.
Egma Mayta Huatuco señala que el proyecto busca incursionar en la
producción de anticuerpos monoclonales para combatir el dengue y el
covid-19, enfermedades para las cuales no hay, hasta el momento, tratamiento, o cuyas vacunas aún están siendo estudiadas a largo plazo.
Estos anticuerpos podrían ser suministrados directamente al paciente para detectar la proteína Spike del SARS-CoV-2, que es utilizada por el virus para introducirse en las células humanas y provocar la enfermedad del covid-19, y combatir al agente patógeno.
Sin embargo, este no es el único objetivo del proyecto. Además de evitar la acelerada replicación del virus, también podría ser útil para producir pruebas de detección del covid-19 e, incluso, detectar específicamente con qué tipo de variante se ha infectado un paciente. Los anticuerpos podrían ser utilizados tanto para el tratamiento como para el diagnóstico de la enfermedad.
"En el caso del covid-19, no hay un tratamiento especifico (...) Ahora, con las
vacunas estamos parcialmente protegidos contra algunas variantes pero hay otra problemática: las proteínas inducidas por las vacunas tienden a bajar en un tiempo de 6 a 8 meses. Eso quiere decir que
vamos a tener que vacunarnos nuevamente", refiere Mayta, por lo que afirma que la mejor solución es producir anticuerpos monoclonales que ataquen directamente al objetivo: el virus.
Para la investigación se están usando linfocitos (células inmunitarias) de pacientes recuperados, seleccionados para identificar cuáles son las células que van a producir los anticuerpos. Estos linfocitos son fusionados con otras células que ayudarán a producir más anticuerpos; es decir, se creará un hibridoma o híbrido.
"Del híbrido se producen los anticuerpos, pero hay que seleccionar cuáles de ellos funcionan. Ahí está el
quid del trabajo: el protocolo y cómo los tenemos que encontrar", explica Mayta. Incluso, asegura que sería mejor si se obtuviera un anticuerpo de alguna de las
variantes del covid-19, pues serviría únicamente para atacar a esa mutación.
Tratamiento para el dengue está en desarrollo
En cuanto al
dengue, la investigadora indica que ya se está experimentando en ratones, y que aún no se han iniciado ensayos en humanos. Sin embargo, la investigación fue paralizada debido a las restricciones por la pandemia del covid-19. Las muestras y materiales se encuentran en Madre de Dios.
Para esta enfermedad, el principio es el mismo: se obtienen linfocitos (producidos por el sistema inmune para combatir la enfermedad) de personas recuperadas y se trabaja en la obtención de los anticuerpos. En este caso, la investigación ya se encuentra en la segunda fase, a diferencia del estudio previo sobre el nuevo coronavirus.
"Se podrían haber salvado muchas vidas con los anticuerpos monoclonales. Por eso, lo queremos usar como terapia y para hacer diagnósticos, para saber qué variantes tienen las personas con una sola prueba en el caso del covid-19", puntualiza Mayta.
Diferencias con el tratamiento de plasma convaleciente
Durante la primera y segunda ola de contagios del covid-19, trascendió la información sobre un novedoso método para combatir la enfermedad: la transferencia de
plasma de pacientes que superaron la enfermedad a otros quienes se encontraban atravesando un cuadro grave.
Mayta explica que, si bien esta terapia puede ser efectiva, con los anticuerpos monoclonales el combate sería aún más "específico", pues se podría disponer de los anticuerpos adecuados para combatir determinadas variantes del virus.
La investigadora agrega que estos anticuerpos podrían ser suministrados a los pacientes con covid-19 de varias formas, incluso como un spray (así como el Interferon) o vía intraperitoneal. "Estas terapias se verían luego. Ahora estamos enfocados en la producción. Hay que reconocer cuál de estas células está produciendo los anticuerpos que queremos (...) Es un trabajo arduo y muy sacrificado", concluye la investigadora.
Por otro lado, el estudio sobre el uso de anticuerpos monoclonales para covid-19 obtuvo un financiamiento de S/ 30,000 por parte del Vicerrectorado de Investigación Académica de la misma casa de estudios y también está a cargo de Virmolpa.
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Publicado: 3/6/2021