EsSalud informó que brinda todas las facilidades al Ministerio Público y a los órganos de control que realizan las investigaciones en torno a las presuntas irregularidades en la compra de seis tomógrafos.
Mediante un comunicado, la entidad indicó que las investigaciones permitirán determinar las responsabilidades administrativas y penales contra los servidores que hubieran infringido las normas.
"EsSalud ratifica que apoya la lucha frontal contra la corrupción y malas prácticas", subrayó la nota difundida esta noche por el Seguro Social.
Según la Contraloría General de la República, en setiembre del 2020 funcionarios de EsSalud direccionaron la compra de seis tomógrafos básicos de emergencia para tratar en plena pandemia a pacientes con covid-19 a una empresa por el importe de S/ 13 millones 380 mil, pese a que dichos equipos incumplían las especificaciones técnicas vigentes sobre la calidad de imagen.
Los involucrados gestionaron y aprobaron una nueva ficha técnica con menor resolución a fin de permitir la participación de dicha empresa en el proceso de compra y luego ser adjudicada.
Como resultado del servicio de control específico, añadió la Contraloría, se identificó por estos hechos presunta responsabilidad penal y/o administrativa en 14 funcionarios y servidores públicos, cinco de los cuales continúan trabajando en la entidad.
Los tomógrafos que se utilizan para captar imágenes detalladas de las estructuras del interior del cuerpo estaban destinados al diagnóstico y tratamiento de pacientes infectados con la covid-19 en los hospitales Guillermo Almenara Irigoyen (Lima), Carlos Alcántara Butterfield, de La Molina (Lima), Gustavo Lanatta Luján de Huacho (Lima provincias), Alberto Sabogal Sologuren (Callao), Rene Toche Groppo de Chincha (Ica) y el Hospital Ilo (Moquegua).
Como antecedente, la Contraloría reveló que el 24 de agosto de 2020 ya se había anulado una contratación para la compra de tomógrafos computarizados de 128 cortes con detectores de resolución espacial de 17.2 lp/cm a la misma empresa, por una presunta sobrevaloración de los equipos e incongruencias de las dos estructuras de costos presentados. Pese a ello, posteriormente, se direccionó nuevamente las cotizaciones para adquirir los tomógrafos a esta misma empresa.