En el Perú existe un mercado laboral importante para los psicólogos, lo que puede animar a muchos jóvenes a optar por esta carrera profesional, que estudia el comportamiento de las personas y busca su bienestar, afirmó hoy el decano de la Facultad de Psicología de la universidad San Marcos, Alberto Quintana Peña.
En el programa
Martes Educativo de la
Agencia Andina, Quintana refirió que en la medida que en nuestra sociedad prevalecen ideas patriarcales, el machismo, la violencia contra la mujer, la relación de dominio del uno sobre el otro, el bullying, entre otros problemas, siempre se requerirá la ayuda de un profesional en salud emocional.
Hay 30 mil psicólogos colegiados en el país, pero la población peruana supera los 32 millones de habitantes. Se necesitan profesionales, dijo, en colegios, en centros de salud, en cortes de justicia, en penales, en clubes deportivos, etcétera. "Debido a esa necesidad, hay profesionales de otras áreas que tratan de cubrir ese déficit, pero muchas veces no se hace de la manera adecuada".
"Hay mucha necesidad de psicólogos y los nuevos valores están incursionando en espacios que ellos conocen más, como las terapias virtuales", refirió.
Perfil del estudiante
En la facultad se estudian dos carreras (escuelas): Psicología y Psicología Organizacional y Gestión Humana. En cada proceso de admisión se ofrecen 60 vacantes para la primera y 45 vacantes para la segunda.
El decano dijo que durante el desarrollo de la carrera se enseñan conocimientos teórico-conceptuales, conocimientos explicativos, destrezas y procedimientos para atender a los pacientes.
La facultad cuenta con laboratorios y próximamente inaugurará
una cámara Gessel, una sala especial en la cual menores de edad rinden su declaraciones mientras que al otro lado, sin ser vistos, los escuchan profesionales de distintas especialidades.
El psicólogo puede trabajar en un centro de estudios, en clubes deportivos, en el ámbito forense y otros, mientras que el de la especialidad de Psicología Organizacional y Gestión Humana trabajará en la gestión del talento humano. "Estos últimos están más enfocados a trabajar dentro de una entidad, para seleccionar al personal, promocionarlo, evaluar perfiles de puesto, generar las estrategias para mejorar el clima dentro de la organización hasta la venta de productos, etc".
Sobre el perfil de los estudiantes, dijo que lo ideal sería que éstos tengan la habilidad de ponerse en el lugar del otro, saber interactuar con otros sin juzgarlos, ser tolerantes, aceptar la diversidad, entre otros.
"El profesional que egresa debe aprender a estar emocionalmente diferenciado del paciente, mantener la mente fría. No puede ponerse a llorar con el paciente ni tampoco juzgarlo. Hay que tener en cuenta que la mayoría de personas tendemos a juzgar a los demás de acuerdo con lo que hemos vivido", refirió.
Durante el desarrollo del programa, Andina ingresó a uno de los laboratorios de la facultad donde se dicta la clase de Psicofisiología. Allí el profesor William Guevara, enseña a sus alumnos a conocer cuáles son las partes más importantes del cerebro para luego determinar sus funciones. "Somos una integración, si nuestro cuerpo no está bien, nuestra mente también y viceversa", enfatizó.
Guevara advirtió que es necesario cuidar el cerebro con una
alimentación saludable y evitando el estrés, una enfermedad frecuente en estos tiempos. "Es un asesino silencioso; para evitarlo hay que relajarse, tomar las cosas con calma, realizar ejercicios, tener contacto con la familia y amigos".
A diferencia del psiquiatra, que prescribe medicinas a los pacientes, el psicólogo trata de comprender el comportamiento de la persona para ayudarla a mejorar su convivencia con los demás, cambiar conductas y lograr su bienestar.
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