Cuando ves que algo no funciona y lo reparas te sientes muy bien. Esa fue la motivación de la ingeniera peruana Carla Agurto, quien dejó el Perú para estudiar su PhD en Ingeniería de la Universidad de Nuevo México y hoy forma parte del equipo de Biología y Psiquiatría Computacional en el Centro de Investigación IBM Thomas J. Watson.
Desde pequeña tuvo interés por las ciencias. La razón: su padre y tío son ingenieros. "Durante mi niñez lo veía reparar dispositivos electrónicos todo el tiempo, me parecía súper interesante lo que hacía, y me despertó la curiosidad de saber cómo es que funcionaban las cosas y cómo repararlas", cuenta la destacada investigadora a la Agencia Andina.
En casa vio cómo su padre, ingeniero de profesión, se encargó de la instalación eléctrica. Todo lo hacía por su cuenta. "Siempre nos enseñaba a mí y a mis hermanos cómo funcionaban algunas cosas. Después de verlos siempre quería arreglar artefactos, tomacorrientes, otros dispositivos electrónicos como radios, aunque no siempre terminaba reparándolos bien", recuerda con nostalgia.
Su vocación siguió creciendo y estudió ingeniería electrónica en la Pontificia Universidad Católica del Perú. Allí integraba un grupo de investigación en el departamento de Ingeniería Electrónica, llamado Procesamiento de señales e Imágenes. Es aquí donde despertó su interés por formarse en el extranjero y llegó a Estados Unidos.
"Dejar el Perú fue una decisión difícil. Al principio fue complicado, pero no soy una persona que se rinde fácilmente, así que seguí adelante con mis planes de estudio y carrera profesional. Además, tenía amigos que compartían la misma experiencia que yo, algo que me sirvió muchísimo", comenta.
Su pasión y esfuerzos rindieron frutos al participar activamente del Centro de Investigación IBM Thomas J. Watson.
Tecnología para todos
La ingeniera peruana está convencida que acceder a la tecnología no debe ser un privilegio de pocos. Por eso, actualmente desarrolla, junto con su equipo, aplicaciones para monitoreo de
enfermedades neurodegenerativas y psiquiátricas, cuyos procesos patológicos no son del todo conocidos.
"Mediante tecnologías de bajo costo buscamos hacer una evaluación en tiempo real del paciente, algo especialmente útil para personas con algún tipo de discapacidad. Nuestros resultados preliminares dan evidencia de que el uso de voz y sensores de bajo costo permiten capturar información de estas
enfermedades", manifiesta.
La investigación continúa en su etapa inicial. "El bajo costo de las tecnologías empleadas permitiría su uso alrededor del mundo. Creo que en el Perú también se puede desarrollar este tipo de investigación. Pero para que esto funcione, se requeriría tener una coordinación adecuada con el personal médico, profesionales de salud, pacientes y familiares de pacientes ya que el éxito de la investigación solo depende del aspecto científico", sostiene.
"Mi trabajo apunta a encontrar soluciones para el monitoreo de enfermedades usando tecnología de bajo costo a través de la voz que se puede registrar a través de un smartphone, por ejemplo. Aquí no habría costo extra de dispositivo, entonces el valor agregado solo es el software en el que trabajamos", explica.
Prometedor futuro para las jóvenes
En marco del Día de la Mujer, Agurto hizo una llamado a las jóvenes interesadas en ciencia para enfrentar sus miedos a los nuevos retos. "Sé que es difícil, pero es bueno salir de tu zona de comodidad. Así es como se logra innovar. Hace cuatro años no imaginaba en lo absoluto que estaría en esta área de investigación. Mirando en retrospectiva creo que definitivamente valió la pena", dice.
Otro consejo importante en este campo es no tenerle miedo al fracaso. La ingeniera peruana recuerda que uno se equivoca constantemente al dedicarse a la investigación científica. "Si no te equivocas, probablemente no estás intentando lo suficiente. Hay que seguir intentando pues esa pequeña fracción de acierto da una satisfacción tremenda y hace que valga la pena todo el tiempo invertido. Los esfuerzos deben apuntar a lo que les apasione. Sea en ciencia o no, el trabajo es más divertido si haces lo que te gusta", destaca.
Durante los próximos años planea continuar su trabajo en el análisis de señales biomédicas con tecnologías como
machine learning para desarrollar herramientas que permitan entender mejor la patología de diversas condiciones clínicas.
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(FIN) SPV
Publicado: 7/3/2020