La fiebre es un síntoma de que algo sucede dentro del cuerpo y en la mayoría de los casos obedece a una infección. Aprenda en esta nota en qué situaciones puede resolverse en casa y cuándo requiere una atención de urgencia.
“Para comenzar no toda fiebre es signo de algo grave”, detalló Mario Paredes, neumólogo del hospital Emergencias Grau de EsSalud, en entrevista con la Agencia Andina.
Explicó que el incremento de temperatura corporal es una respuesta ante diversos procesos y que en muchas ocasiones esta puede controlarse en casa de forma casera.
“No todas las fiebres son por infecciones. Hay fiebres debido a procesos neoplásicos y a enfermedades inflamatorias, como Lupus o artritis. Para comenzar, hay que buscar algunos síntomas que nos puedan indicar el origen de la fiebre. Podría ser un dolor de garganta, dolor de estómago, dolor de oído o muela. Si no hay señales que nos guíen en el caso y la fiebre persiste o se incrementa es ideal acudir a un médico”.
El experto de Essalud indicó que la temperatura corporal se pude medir tanto en la boca (debajo de la lengua) como en la axila, lugares que tienen sus propios rangos de normalidad y alarma.
La temperatura por vía oral se considera normal entre los 37 a los 37.9 grados. A partir de los 38 grados ya se considera fiebre.
Mientras que la temperatura axilar se considera normal entre 36.5 grados hasta los 37.5 grados. Mayor a esa temperatura se considera fiebre.
¿Qué hacer?
Ante la aparición de fiebre, Paredes pide mantener la calma y evitar el pánico, sobre todo si se trata de niños o adultos mayores.
“Si la fiebre no está ocasionando ningún malestar general y no es muy alta, es decir bordea los 38 grados, pero no continúa subiendo, no es obligatorio bajar la fiebre. Diferente es el caso donde hay fiebres altas, es decir de 39 a 40 grados, allí sí definitivamente hay que actuar pronto para reducir la temperatura”.
Explicó que hay mecanismos físicos y farmacológicos para atenuarla. En el caso de los primeros tenemos al agua, muy conocida para bajar la temperatura corporal, a través de baños o duchas tibias a frías, en un ambiente bien cerrado.
También puede usarse en paños que se colocarán fríos en la frente o partes de cuerpo que resulten más calientes.
En el caso de las medidas farmacológicas, se sugiere el uso de paracetamol o algunos antigripales que ya lo contienen, para calmar el síntoma de fiebre.
El experto recomienda no abrigarse en exceso y cuidar la hidratación. De ser posible beber líquidos a temperatura del ambiente o tibios.
“En ninguno de los casos se recomienda automedicarse. Muchos van a la farmacia, compran un inyectable o un antibiótico porque creen que con eso van a cortar la fiebre. Los antibióticos siempre deben estar prescritos por un profesional y ante un cuadro bacteriano, por eso no deben comprarse sin receta médica, de lo contrario estaremos contribuyendo a crear resistencia a los antibióticos”.
Recordó a la población que en época de invierno suele registrarse un aumento de infecciones en las vías respiratorias, sobre todo altas, como resfríos, gripes, faringitis, así como infecciones en las vías bajas, como bronquitis o neumonía, que son de mayor gravedad.
La diferencia entre ambos grupos son las señales de alarma, que superan el cuadro de fiebre, indicó.
¿Señales de alarma?
Jorge Escobar Chuquiray, de la Dirección General de Gestión del Riesgo de Desastres y Defensa Nacional en Salud (DIGERD) del Ministerio de Salud, explicó que los cuadros febriles que demandan un seguimiento médico inmediato son aquellos donde hay dificultad para respirar.
“Tienen dificultad para respirar o están respirando muy rápido, como si hubieran corrido. De lo contrario tienen una saturación baja, se les hunde el pechito al respirar o los dedos se les pone azulitos. En todos estos casos se debe acudir a un servicio de urgencia, sobre todo si se trata de niños pequeños o personas mayores con alguna vulnerabilidad de fondo”, declaró a la Agencia Andina.
El especialista reiteró que un cuadro febril con temperaturas no muy altas se puede manejar en casa siempre y cuando no venga acompañado de dificultad para respirar.
“La temperatura de 40 grados sí es una señal de alarma. Hay que recordar que la hipertermia, temperatura bastante alta, puede causar convulsiones en los niños y producir una encefalitis. Debe bajarse la fiebre cuanto antes mientras se busca atención médica”.
¿Cuándo tomar antibióticos?
Escobar Chuquiray fue enfático en desmentir que se requieran antibióticos para todos los casos de fiebre.
“Nuestros maestros de clínica nos decían: una infección viral con antibiótico dura 7 días y sin antibióticos dura una semana. Es decir, que el antibiótico no tiene efecto sobre los virus, hay que entender que está hecho más para bacterias. Por eso es vital e importante la habilidad del médico para diferenciar una infección de la otra”.
Explicó que las infecciones virales, que también pueden generar cierta fiebre, por lo general se resuelven en un lapso de siete días, durante los cuáles no generan mayores problemas.
Sin embargo, un caso de fiebre alta y constante, con dificultad para respirar demanda otro tratamiento, con intervención médica inmediata, porque podría tratarse de una neumonía.
“Ahora mismo estamos con 2, 300 casos de neumonía en menores de cinco años y tenemos 1,300 casos en mayores de 60 años. De igual manera 24 niños y 85 adultos mayores han fallecido por neumonía en todo el Perú. Debemos estar atentos a las señales de alerta”, detalló el director de la DIGERD.
A fin de atender oportunamente estos casos, el Minsa ha implementado una serie de medidas para evitar el deceso de los pacientes por infecciones respiratorias agudas, entre ellas una mayor capacitación del personal de salud, fortalecer las jornadas de vacunación contra la influenza y neumococo, así como realizar visitas domiciliarias en casos de neumonía y hacer el seguimientos del paciente hasta por 5 veces antes de darle el alta correspondiente.
Mucha observación
El experto del Minsa pidió a las familias no abarrotar los hospitales apenas surja un caso de fiebre. Exhortó a las familias estar atentas a los síntomas que acompañan el caso y así definir mejor si puede atenderse en casa, con asesoría telefónica o telemedicina, o de lo contrario se requiere atención de urgencia.
“El Minsa cuenta con 8,000 establecimientos de salud, el 85% de los cuales corresponden al primer nivel de atención, donde pueden manejarse estos casos. Los hospitales están hechos para situaciones más complejas. Es importante que instalemos una cultura del cuidado y eso significa monitoreo permanente para saber qué pasos dar”.
Agregó que cuando se habla de la cultura del cuidado esta incluye un soporte de salud mental porque algunas personas, cuando sienten fiebre, entran en pánico y pueden tener preocupación, miedo o estrés los cuales bajan las defensas y no ayudarán en su recuperación.
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(FIN) KGR/LIT
JRA
Publicado: 12/7/2022