Medio centenar de escolares ha iniciado el proceso de aprendizaje sobre iconografía chimú a través del barro, esa masa amorfa a la que le van dando forma de peces, anzumitos (nutrias marinas), pelícanos y otros diseños que aparecen en los muros de Nik An, el único conjunto amurallado del complejo arqueológico Chan Chan abierto al turismo.
La iniciativa es promovida por el Proyecto Especial Complejo Arqueológico Chan Chan (Pecach), por medio del componente de Promoción y Difusión del proyecto de inversión “Restauración de los muros perimetrales del conjunto amurallado Utzh An, antes Gran Chimú” y tiene como objetivo difundir los valores excepcionales de este Patrimonio Cultural de la Humanidad.
Para ello, los trabajadores del Pecach han construido muros de prueba para que los estudiantes de la región participen de sus diversos talleres de sensibilización.
Delegación escolar
En esta oportunidad participaron 50 escolares de la institución educativa 80076 Milenario Chan Chan, ubicada en el centro poblado Villa del Mar, una de las zonas más próxima al museo de Chan Chan y sitio monumental.
La delegación de niños participó en el taller vivencial de elaboración de relieves con iconografía chimú que tiene como finalidad involucrar a los estudiantes con las prácticas ancestrales y valorar el esfuerzo de los trabajadores de
Chan Chan en la conservación de nuestro patrimonio arqueológico.
“De esta manera, se generan conceptos de valoración individuales y grupales. La experiencia vivencial estimula en ellos la preservación de su vínculo con el patrimonio y también con su cuidado”, destacó el director del Pecach, David Calderón.
Aprender a restaurar
Previo al inicio del taller, la promotora social Susana Honores Barrera ofreció la charla de sensibilización “Chan Chan, Patrimonio Cultural de la Humanidad”, en la cual se reflexionó sobre conceptos generales que sostienen la importancia de la ciudad de adobe más grande de América en nuestra vida actual, se informa sobre los avances en la conservación de las estructuras monumentales y se asumen compromisos con su defensa y preservación.
Después se conduce a los participantes hacia otro espacio colindante al museo habilitado para la práctica de elaboración de adobes y relieves; aquí el especialista en conservación Edwin Angulo Orbegoso explica, de manera sencilla y clara, la técnica para la elaboración de relieves sobre muros de adobes imitando lo hecho por nuestros ancestros chimúes.
Manos a la obra
Se proporciona a los estudiantes moldes con diseño de iconografía de la cultura Chimú, estacas de manera, recipientes con cierre hermético con agua y una esponja, materiales necesarios para elaborar sus relieves bajo la atenta supervisión de los especialistas del proyecto.
Al concretar la tarea, no solo se plasma sobre el muro un decorado, sino también se eternizan sonrisas en los rostros de los estudiantes, quienes en unas dos horas experimentan el valor del trabajo e internalizan la fortuna de ser herederos de Chan Chan, obra del genio creador humano que por sus valores excepcionales es herencia mundial.
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