16:00 | Huancayo, set. 24 (ANDINA).
Por Ernesto Carlín, enviado especialCon un viaje en tren de 15 horas de duración se celebraron los cien años de la llegada del Ferrocarril Central a la ciudad de Huancayo, capital del departamento de Junín, que marcó un hito en el desarrollo social y económico de esta parte del país.
De la estación limeña de Monserrate partió anoche un tren para emprender el “Viaje Centenario Lima-Huancayo”, contando entre sus pasajeros con autoridades y distinguidas personalidades.
Participan de este recorrido el embajador de Polonia, Przemyslaw Marzec; el director general de carreteras y ferrocarriles del MTC, Walter Zecenardo; y la presidenta del patronato del Ferrocarril Central, Elizabeth Ventura.
También están presentes el alcalde de Huancayo, Freddy Arana; el director regional de Turismo, José Luis Alvarado; el congresista Miró Ruiz; y el gerente de Ferrovías Central, Jaime Blanco.
Durante el recorrido hubo paradas en diversos pueblos en los que también se celebró la llegada del Ferrocarril Central a Huancayo. El primer agasajo fue anoche, en el pueblo de la sierra limeña de San Bartolomé.
Al llegar a La Oroya, al amanecer, también se realizó un acto conmemorativo. Otros puntos donde se efectuaron paradas simbólicas fueron Jauja y Concepción, para finalmente llegar a la Ciudad Incontrastable.
La histórica locomotora a vapor N° 206 estaba a la cabeza y llegó a la estación de Huancayo al promediar las 13:00 horas, pese a algunos pequeños desperfectos, todo esto en medio de la emoción y el júbilo del público y las autoridades.
En cada punto se degustó la comida típica y se escucharon las canciones del lugar.
En la última parada, Huancayo, se develaron dos bustos: uno dedicado al ingeniero polaco Ernesto Malinoswki, responsable del trazado del Ferrocarril Central; y otro al ferroviario desconocido.
Ambas esculturas fueron hechas con el aporte de la Asociación de Ingenieros y Técnicos Ferroviarios de la Línea Ferroviaria Polaca.
La última ceremonia contó con la presencia del presidente regional de Junín, Vladimiro Huaroc Portocarrero.
El 24 de setiembre de 1908, su llegada captó la admiración de los pobladores del valle del Mantaro, con el que se iniciaba también un hito importante en el desarrollo social y económico de la Ciudad Incontrastable.
El Ferrocarril Central, cuya ruta turística es actualmente Lima-Huancayo-Lima, es el más alto de América y el segundo más alto del mundo.
Sus 535 kilómetros de extensión total representan el esfuerzo de miles de hombres que iniciaron la obra durante la segunda mitad del siglo XIX, transportaron toneladas de tierra, madera y hierro, vencieron epidemias desconocidas, y sin maquinaria moderna, computadoras ni satélites vencieron las escarpadas alturas de la cordillera de los Andes.
Las obras del Ferrocarril Central se iniciaron el 20 de enero de 1870. Se calcula que alrededor de 10 mil hombres trabajaron en la construcción, eran de la Costa, de Chile o chinos especialmente traídos de Macao. Había gran dificultad en el transporte del material, hierro, carbón, maquinarias, madera y puentes construidos e importados de Inglaterra, Francia y Estados Unidos de América.
(FIN) ECG/PTM/JOT
GRM
Publicado: 24/9/2008