Un destino en ascenso, ideal para quienes buscan aventura, naturaleza y experiencias fuera de lo común. Cuando pensamos en selva, ríos o bosques, pocas veces imaginamos un mundo subterráneo. Sin embargo, la región San Martin nos depara una sorpresa y nos presenta dos nuevos destinos turísticos ocultos que prometen convertirse en sensación.
En el Destino Alto Mayo, en la
región San Martín, el Corazón del Perú,
dos maravillas ocultas —la Cueva de Palestina y la Cueva Cascada Escondida— invitan a descubrir cavernas milenarias, formaciones rocosas que desafían la imaginación y ríos que nacen en las entrañas de la tierra.
Cueva de Palestina: historia, geología y naturaleza milenaria

Ubicada en el distrito de Nueva Cajamarca (provincia de Rioja), la Cueva de Palestina es una joya cárstica con más de 60 millones de años. En sus galerías descansan estalactitas, estalagmitas, columnas y cortinas rocosas formadas por filtraciones milenarias de agua.
Con una extensión cercana a los 3 416 metros, es la cueva más larga de San Martín y la tercera más profunda del Perú.

El sistema cuenta con dos zonas definidas:
* Zona fósil, habilitada para turismo, donde pueden recorrerse pasadizos secos y admirarse sus formaciones naturales.
* Zona activa, atravesada por un río subterráneo y habitada por fauna especializada como los “huacharos”, actualmente no autorizada para visitas.

Tras más de tres años cerrada debido a la pandemia, la cueva reabrió en diciembre de 2022 bajo protocolos sanitarios y normas de seguridad, lo que la convierte en un espacio regulado y preparado para una experiencia auténtica de espeleología.
Cueva Cascada Escondida: aventura, agua y adrenalina subterránea
A pocos kilómetros, en Nueva Cajamarca, la Cueva Cascada Escondida complementa la oferta del Alto Mayo con una experiencia más intensa. Este sitio, parte de la faja marginal del río Yuracyacu, es un “tragadero” formado por la erosión constante del agua.
A unos 190 metros de profundidad, el
visitante encuentra una impresionante cascada subterránea de entre 12 y 15 metros. Para llegar a ella se realiza un descenso con cuerdas y anclajes, lo que exige condición física, equipo especializado y guías expertos. Solo se opera mediante agencias autorizadas.

El recorrido incluye baño en la cascada, exploración de cavernas, fotografía y un entorno subterráneo único en la Amazonía peruana. Cabe destacar que en San Martín estos espacios están debidamente autorizados para actividades de aventura, pero la normativa no permite deportes acuáticos recreativos como kayak, parasailing, motos acuáticas, entre otros.
Para recorrer estas cuevas es obligatorio hacerlo con agencias de viajes autorizadas, las cuales deben estar registradas ante las autoridades, garantizar equipo adecuado (casco, botas, iluminación) y cumplir los protocolos de seguridad.
Cómo llegar y cuándo visitar
Desde la ciudad de Rioja, se toma la carretera hacia Nueva Cajamarca: son 22 km (25–30 minutos en auto). Desde allí se asciende hacia el caserío Palestina o zonas cercanas, según la cueva elegida.
La mejor temporada para visitar es la época seca, aunque ambas cuevas se encuentran habilitadas todo el año. Es esencial contratar una agencia formal, usar el equipo adecuado, llevar repelente y agua, y seguir todas las indicaciones del guía.

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