El satélite Sentinel1-D fue lanzado este 4 de noviembre por la Agencia Espacial Europea (ESA) para reunirse en el espacio con su gemelo, el Sentinel1-C, como parte de la misión para capturar imágenes de radar de alta resolución sobre la tierra, hielo y mar.
El
Sentinel-1 orbita la Tierra a una altitud de 700 km, por lo que se encuentra el rango orbital más común para muchos tipos de satélites, incluidos los satélites de observación terrestre como el
PerúSAT-1 de Conida.
El
lanzamiento fue realizado el 4 de noviembre a las 3:35 PM (hora peruana) en el vuelo VA265 del cohete Ariane 6.
¿Por qué es tan importante el lanzamiento del satélite Sentinel1-D? Este instrumento científico puede rastrear y monitorizar cómo los accidentes geográficos de la superficie terrestre, como casas, puentes y afloramientos rocosos, se mueven verticalmente (hacia arriba o hacia abajo) y lateralmente a lo largo del tiempo.
Según la
ESA, esto es posible gracias a la comparación precisa de las diferencias entre imágenes tomadas en fechas sucesivas sobre la misma área de la superficie terrestre, mediante una técnica denominada interferometría. Este sistema da soporte a servicios como el Servicio Europeo de Movimiento del Suelo (EGMS), que proporciona información homogénea sobre los movimientos del terreno a escala continental con precisión milimétrica y actualizaciones anuales.
Los satélites Sentinel-1 cuentan con su propia fuente de iluminación, a diferencia de los satélites ópticos que dependen del Sol para iluminar la superficie terrestre y utilizan la luz solar reflejada para capturar imágenes. Para que su instrumento de radar pueda recopilar datos incluso en la oscuridad, Sentinel-1 emite una ráfaga de aproximadamente 2000 destellos por segundo, que se reflejan en la superficie terrestre. Al detectar estos ecos, Sentinel-1 crea un mapa de radar del terreno, el océano o el hielo. Por ello, a diferencia de los satélites ópticos, Sentinel-1 es una fuente ideal de información sobre nuestro entorno en el Ártico durante los meses de invierno, cuando las horas de luz son escasas.
Crea un mapa de barcos y busques en el mar
Además, el Sentinel-1D y su satélite gemelo, el Sentinel-1C, incorporan un instrumento adicional denominado Sistema de Identificación Automática (AIS), que capta las señales de embarcaciones en zonas costeras y el Ártico. Los dispositivos AIS, instalados en los buques, emiten información como la identificación única, la posición, el rumbo y la velocidad.
En las imágenes de radar del Sentinel-1, los buques aparecen como objetos brillantes sobre un fondo oscuro, lo que permite seguir su ubicación y movimientos desde el espacio. Al combinar la información sobre la ubicación de los buques con la información del AIS, el Sentinel-1 se convierte en una potente herramienta para la vigilancia marítima. Entre sus aplicaciones se incluyen la detección y localización de buques que podrían ser responsables de vertidos de petróleo en alta mar, el control de la pesca ilegal y/o los cruces fronterizos, y la detección de buques que no se detectan, es decir, aquellos que han desactivado su AIS para evitar ser detectados.
Además, el satélite Sentinel-1 puede ver debajo de los huracanes. A diferencia de los satélites ópticos, el radar del Sentinel-1 puede penetrar las nubes de un huracán para medir las condiciones de la superficie del mar, incluyendo la detección de los campos de viento.
El Sentinel-1 proporcionará información única sobre la estructura del huracán, lo que permitirá monitorear y evaluar su potencial destructivo, además de brindar datos para la gestión de emergencias y la navegación que serían difíciles de obtener con satélites ópticos.
Más en Andina:(FIN) NDP/SPV
JRA
Publicado: 3/11/2025