Más de 3,600 personas participan como voluntarios y voluntarias en las iniciativas "Hombres por la Igualdad" y "Mujeres acompañando mujeres" del Programa Nacional Aurora, liderado por el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP). Su labor tiene como objetivo promover comunidades donde prevalezcan la igualdad de oportunidades y la ausencia de violencia.
Juan Pablo Rivera Flores: liderazgo para el cambio
Uno de ellos es Juan Pablo Rivera Flores, de Santa Anita, parte de los 1980 voluntarios de la intervención Hombres por la Igualdad, que promueve la formación de hombres líderes para combatir la violencia hacia las mujeres. Estos hombres realizan activismo comunitario, sensibilizando a sus pares sobre temas como paternidades afectivas y corresponsabilidad en el hogar.
Él decidió, en 2019, impulsar un cambio en su comunidad. Su rutina diaria se divide entre su emprendimiento de serigrafía, su familia y el voluntariado. A sus 51 años, Juan Pablo ha demostrado que el cambio es posible, algo que también ha impactado a su familia, compuesta por su esposa, tres hijas y un hijo.
“Junto a mi primo fundamos el voluntariado en mi distrito y promovemos la participación masculina en igualdad. Tras la pandemia, retomamos con fuerza. Por ejemplo, yo pasé de ser solo proveedor a compartir las tareas del hogar, escuchar y validar las emociones de mi familia. Ahora dedico mi tiempo a motivar a otros hombres a ser mejores padres y compañeros”, expresó.
Juan Pablo destaca la satisfacción de enseñar y compartir lo aprendido. “No basta con cambiar individualmente; es necesario involucrar a más hombres. Ahora, la participación masculina en tareas como llevar a los hijos al colegio ha aumentado en mi comunidad. Además, el voluntariado es una herramienta clave para erradicar la violencia, permitiendo transformar realidades y construir un futuro mejor. Como voluntarios, tenemos mucho para dar y compartir”.
Las regiones con mayor número de voluntarios de Hombres por la Igualdad son Junín, con 167; La Libertad, con 138; Cusco, con 118; y San Martín y Piura, con 111 respectivamente.
Lucía Azucena: "somos capaces de prevenir la violencia"
Desde la cuna de la marinera, Lucía Azucena Paz Solano, psicóloga de 25 años y mentora voluntaria desde 2020 en el distrito de Florencia de Mora, cuenta que ha acompañado a cuatro usuarias en su proceso de salir de la violencia.
“Mi madre fue quien me motivó a unirme a este voluntariado. En este proceso he acompañado a mis usuarias en sus logros y la decisión que tomaron frente a la violencia por sí mismas. Mi mayor motivación es ayudarlas a adquirir conocimientos y que puedan aplicarlos y transmitirlos a otras personas”.
La mentora define su labor como un acto de amor, fortaleza, humanidad y empatía aspectos fundamentales para entender a quienes acompañan. Uno de sus mayores retos fue ayudar a una mujer gestante venezolana, que se encontraba sola en el país, a salir del círculo de la violencia.
“Junto con la profesional de la intervención y mis usuarias siempre nos escuchamos, estamos en comunicación constante y somos un equipo. Invito a que más mujeres se unan porque somos capaces de ser mejores y de cambiar la realidad para prevenir la violencia”, finalizó.
María Eugenia: "buscamos mujeres empoderadas"
En Piura, en el distrito de Castilla, María Eugenia Solano Navarro, de 61 años, madre de familia y mentora voluntaria desde hace tres años, acompaña a mujeres víctimas de violencia.
Ella explica que, durante las sesiones, trabaja en fortalecer la autoestima de las participantes, informa sobre qué es la violencia y les recuerda lo valiosas que son. Actualmente, apoya a cuatro usuarias que han logrado transformar sus vidas, recuperar sus sueños y alcanzar metas para vivir libres de violencia.
“Sé que el voluntariado que realizo es importante porque tiene un impacto directo en mi comunidad y empodera a más mujeres. Al final del día sabes que tu labor se multiplica porque has ayudado”, añadió
Actualmente, 1638 mentoras voluntarias de la intervención “Mujeres acompañando mujeres” han sido capacitadas para brindar acompañamiento básico a víctimas de violencia de género, ayudándolas a continuar con sus procesos legales, para que no desistan de la denuncia y alcancen justicia.
Las regiones con más mentoras son Lima Metropolitana, con 259; Junín, con 219; y Cusco, con 170.
Si quieres formar parte de esta red de voluntariado, te invitamos a escribir a los siguientes correos para más información: hpi@aurora.gob.pe y mam@aurora.gob.pe.
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(FIN) NDP/RRC