Un cohete capaz de producir lluvia, un robot busca personas, un dispositivo que permite a agricultores controlar plagas o un globo estratosférico que lanza semillas para reforestar zonas destruidas por la minería ilegal son los cuatro innovadores proyectos creados por estudiantes de la
, pero que por falta de dinero podrían quedarse sin participar en el C’espace, competencia organizada por la Agencia Espacial Francesa (CNES).
A pocos días de realizarse este importante concurso en Francia, del 14 al 19 de julio, los jóvenes no han logrado conseguir los pasajes aéreos para viajar. Por ello, hacen un llamado a las empresas, instituciones y a todas las personas interesadas en brindar su apoyo económico. En total son cuatro proyectos innovadores que buscan representar al Perú en la competencia científica internacional.
“Nosotros cumplimos con todos los requerimientos que exige la competencia, por ejemplo tamaño, autonomía, potencia, entre otros. Lo que más nos enorgullece es presentar nuestro trabajo al mundo y demostrar que aquí en Perú se desarrolla tecnología muy novedosa y que no tenemos nada que envidiar a otros países”, subraya Andrés Díaz Zamora, estudiante de ingeniera mecánica eléctrica.
Monitoreo del cultivo desde el celular
Díaz Zamora forma parte del equipo que creó un robot que ayuda al agricultor y mejora las técnicas de riego. Su nombre es CanSAT “Allpa Llamk’ay” y recoge datos del medio ambiente para controlar plagas y enfermedades en los cultivos agrícolas, además de reconocer los factores de riesgo.
“Con los sensores que tiene este dispositivo,
los agricultores reconocerán lo que sucede en el medio ambiente. Permite identificar cuándo cambiar de cultivo porque el microclima no será el adecuado o cuándo no prosperará la producción. El agricultor, desde su celular, puede monitorear su cultivo, es de fácil uso y no necesita internet”, explica Rommel Valqui Ramírez, estudiante de Mecánica Eléctrica de la
UNI.
Este proyecto ya despertó el interés de la Municipalidad de Lima y la Municipalidad de Los Olivos, instituciones que han decidido implementarlo en sus respectivas áreas.
Robot busca personas
“Chaski” es un robot explorador que puede ser utilizado en las labores de búsqueda luego de un desastre natural o incendio. Gracias a la cámara de calor que tiene incorporada, puede detectar si debajo de un escombro hay personas o mascotas, de manera que el personal encargado puede ir directamente al objetivo sin perder tiempo.
Otra importante aplicación es en labores de desminado, pues gracias a los sensores que posee puede rastrear en qué posición y lugar se encuentran las minas.
“Con este dispositivo el trabajo de desminado será más efectivo y seguro, sin que el personal que lo realiza corra riesgos ni accidentes", señala Abraham Castro Torres, creador de este robot junto a seis compañeros más de las Facultades de Mecatrónica, Ingeniería de Sistemas, Ciencias de la Computación e Ingeniería Física.
Kuntur: el cohete que produce lluvia
Este innovador proyecto, realizado en conjunto con estudiantes de la
Universidad San Marcos, es uno de los favoritos para coronarse como el mejor dentro de la competencia.
"Kuntur" lleva una carga bacteriana hasta la altura de las nubes, produciendo lluvias. El año pasado, este invento se llevó el primer lugar en la categoría de innovación del concurso realizado por la Sociedad Nacional de Petróleo y Energía.
“Con este cohete, podemos atenuar las paradas en las plantas mineras debido a las lluvias y así ahorrar millones de dólares", detalla Jafet Santivañez.
La idea es que, al tener conocimiento de que lloverá en una zona donde hay una planta minera, se lance el cohete para provocar que las nubes que se están aproximando descarguen en un punto alejado y no sobre la minera.
También puede servir para reducir los daños durante el Fenómeno El Niño. En este caso, la propuesta de estos jóvenes es que antes que las nubes lleguen a la población costera, descarguen sus aguas en el mar, gracias al cohete con la carga bacteriana.
Globos que reforestan la selva
El cuarto proyecto en llevar a Francia es el globo estratosférico que sube hasta 26 km de altitud y vuelve al suelo con un paracaídas. Este innovador proyecto permite medir los parámetros de ozono, gases contaminantes, etc; pero eso no es todo, sirve para reforestar nuestra selva tan dañada por la minería ilegal.
“La idea es lanzar varios globos que contengan cápsulas con semillas, las cuales gracias a un sistema electrónico integrado, caerán en zonas donde se han deforestado miles de hectáreas de cultivo”, explica Jafet Santivañez, joven estudiante que dejó su natal Huancayo para convertirse en ingeniero.
Así como él, y sus demás compañeros han dedicado horas de trabajo dentro y fuera de las aulas en estos proyectos. Todo el esfuerzo realizado valdrá la pena si logran viajar y participar. Ellos prometen dejar dejar el nombre del Perú en alto y estamos seguros que así será.
Para cualquier tipo de ayuda económica pueden escribir a Genriquezl @UNI.edu.pe o llamar al celular 997 422 137.