La Festividad de Todos los Santos y el homenaje a los difuntos que partieron al más allá no sería lo mismo en la ciudad de Cerro de Pasco sin la dulce ofrenda de las famosas Tanta Wawas. Estos panes en las mesas cargados de simbolismo y tradición, se convierten en el eje central de una celebración que une a las familias cerreñas.
Es un momento cumbre para la comunidad, donde la memoria de los seres queridos se honra con alegría, color y un aroma único.

La manifestación más vibrante de esta tradición es la feria y festival que la Asociación Las Cerreñitas de Pasco organiza anualmente al frente del Coliseo Municipal. Los integrantes de esta agrupación dedican su esfuerzo a mantener vivo este legado, exhibiendo y vendiendo las Tanta Wawas y otras figuras de pan. Esta feria es el punto de encuentro para pasqueños, incluyendo a aquellos que han salido de la ciudad por motivos de salud o viaje, quienes encuentran en estos paneles el sabor inconfundible de sus raíces.
La elaboración de estas piezas es un arte minucioso que involucra a panificadores de la región, destacando la mano de obra de los hornos de Huariaca. Utilizando harina de trigo y maíz, se da forma no solo a las Tanta Wawas (muñecas), sino también a una amplia variedad de figuras como caballitos con sus jinetes, palomitas (urpay) y bizcochuelos.

Estas creaciones son decoradas con colores intensos que las transforman en auténticas obras de arte popular, y que los niños disfrutan particularmente del juego.
El detalle más sobresaliente de las Tanta Wawas de Pasco es su vestimenta, un tributo a las danzas del Perú. Las figuras de pan son ataviadas con trajes multicolores que replican con precisión los atuendos de bailes regionales como la chunguinada y la mulisa cerreña. La representación se extiende a otras tradiciones nacionales, incluyendo vestimentas inspiradas en la tunantada de Junín y danzas cusqueñas. Asimismo, los caballitos llevan jinetes que conmemoran a los húsares de Junín de la Batalla de Junín, e incluso se observa la inclusión de emblemas contemporáneos, como el del club Universitario de Deportes, reciente tricampeón del fútbol peruano.

El propósito fundamental de estos paneles se materializa en la mesa de difuntos. Las familias los adquieren para armar altares en sus hogares, donde las Tanta Wawas y otras figuras de pan se disponen junto a las comidas predilectas del ser querido que partió. Según declaraciones de vendedor de antaño, "muchos compran las Tantawawas para la ofrenda, poniéndolas en la mesa junto a las comidas típicas: las wawas grandes para los adultos, las medianas para los jóvenes y las pequeñas para los niños que partieron al más allá".
Complementando esta ofrenda de amor, la feria ofrece una gran variedad de elementos blancos esenciales para la decoración de tumbas, como cruces, coronas y flores naturales -gladiolos, alelíes y rosas-, que son adquiridos por los pobladores para adornar los cementerios.
(FIN) WMC