Andina

Semana Santa: así fue la bendición del Señor de los Temblores en Cusco

Se ofició una misa y homilía en La Catedral que fue transmitida por medios virtuales

El Señor de los Temblores, patrón jurado de la ciudad de Cusco bendijo a su pueblo desde el interior de la Basílica Catedral, tras una homilía oficiada en la víspera por el arzobispo de Cusco, monseñor Richard Alarcón Urrutia. Foto: Arzobispado de Cusco.

El Señor de los Temblores, patrón jurado de la ciudad de Cusco bendijo a su pueblo desde el interior de la Basílica Catedral, tras una homilía oficiada en la víspera por el arzobispo de Cusco, monseñor Richard Alarcón Urrutia. Foto: Arzobispado de Cusco.

12:37 | Cusco, mar. 30.

El Señor de los Temblores, patrón jurado de la ciudad de Cusco bendijo a su pueblo desde el interior de la Basílica Catedral, tras una homilía oficiada en la víspera por el arzobispo de Cusco, monseñor Richard Alarcón Urrutia.

El avance del covid-19 en esta región obligó a que no se desarrollará por segundo año consecutivo la tradicional procesión de la imagen morena del Señor de los Temblores, cariñosamente llamado “Taytacha” en quechua, por el centro histórico de la Ciudad Imperial.


Un reducido número de la comunidad eclesiástica, autoridades locales, músicos y miembros de la Policía Nacional accedieron al interior de la Catedral, se apostaron al pie de la venerada imagen para participar de la misa que fue transmitida por plataformas virtuales y canales de televisión.

Desde temprano se hizo el cambio de sudario, se revistió el altar con flores “Ñucchu”, rojizas de néctar dulce, y se dispersó incienso. Con el paso de las horas se oyó el canto melancólico de la “Chayñas” (eternas cantoras en quechua). El grupo de participantes mantuvo la distancia que establece el protocolo sanitario para prevenir el contagio del covid-19.


“Jesús ahora está andando por las vías virtuales y ha llegado a nuestros hogares. Él está tocando tu puerta, él está esperando que lo recibas y lo hagas entrar a compartir tu mesa. Si lo recibes con amor, dirás el Señor está con nosotros”, expresó el arzobispo durante su homilía, al implorar al altísimo el cese de esta pandemia y que no haya más víctimas.

El Cristo crucificado protagonizó, por la noche, un breve recorrido por el interior de la Catedral y bendijo desde ahí a toda la ciudad. Hasta hace dos años la efigie solía estar en el atrio y, desde ahí, ante más de 100,000 fieles devotos, recorría la plaza de Armas y calles adyacentes para bendecir a la población.


Llegada las 8 de la noche se oyó el ulular de las sirenas de policías y bomberos, que también llegaron para este Lunes Santo, y así la ciudad de Cusco se unió en oración para pedir por el cese del covid-19 y para que el Taytacha de los Temblores vuelva a encontrarse con su pueblo en directo.

(FIN) PHS/LZD

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Publicado: 30/3/2021