Tras dos años de pandemia por el covid-19, el retorno a las clases presenciales en la facultad de Odontología de la universidad San Marcos es ya una realidad que beneficia a cientos de estudiantes que requerían volver a los talleres y laboratorios para afianzar sus aprendizajes.
El decano de la facultad de Odontología, doctor Romel Watanabe, indicó que este retorno empezó de manera progresiva desde enero de este año y tuvo una gran aceptación de los jóvenes universitarios, quienes cumplen responsablemente los protocolos de bioseguridad.
“En San Marcos somos la primera facultad que reinició sus actividades presenciales, tanto de docentes, alumnos como personal administrativo. Se inició en forma paulatina desde enero de 2022 y cumpliendo los protocolos de bioseguridad, lo cual ha permitido que el 100 % de los estudiantes pueda asistir a sus clases prácticas”, subrayó a la agencia Andina.
De acuerdo con Watanabe, los laboratorios y la clínica de la facultad se abrieron solo para las clases prácticas desde el primer semestre de este año y la parte teórica continúa impartiéndose de forma virtual porque aún no se puede concentrar a 70 u 80 alumnos en un aula, dado que aún estamos en cuarta ola de covid-19.
Con la finalidad de que el 100 % de los alumnos puedan acceder a los laboratorios y controlar los aforos, la facultad dispuso el uso de sus instalaciones de lunes a sábado en el horario de 8 a.m. a 7 p.m. y en grupos reducidos de cuatro a cinco estudiantes y siempre acompañados de un docente.
Los laboratorios han sido rediseñados de tal manera que cada mesa de trabajo tiene una división de acrílico, lo que permite conservar la distancia señalada por las normas técnicas del Minsa con el objetivo de evitar los contagios de covid-19 en los centros de estudios.
Al momento de ingresar a estas salas de prácticas, el estudiante debe portar correctamente su mascarilla, guantes y mandil descartable. Asimismo, no podrá ingresar a la universidad si no tiene su esquema de vacunación completo contra el covid-19.
Protocolo ante contagios
En caso de producirse algún contagio de covid-19 entre los estudiantes o docentes, la persona infectada debe realizar la cuarentena respectiva hasta encontrarse completamente restablecida. Las clases no se suspenden pero sí se hace un seguimiento a los alumnos o compañeros de trabajo que tuvieron contacto con el enfermo.
“Durante estos meses hemos tenido uno o dos contagios pero tomamos la decisión de no suspender las clases, solo el aislamiento de la persona afectada sea docente o estudiante. Lo que sí realizamos es el seguimiento respectivo para ver la evolución del paciente y se avisa a las personas con quienes tuvo contacto para que estén alertas”, refirió.
Clínica odontológica
Watanabe lamentó que hasta el momento no se haya podido abrir al público las atenciones en la clínica odontológica debido a que el número de contagios por la cuarta ola de covid-19, todavía es muy alto, pero mantiene la esperanza de que puedan hacerlo a fines de año o inicios del próximo.
“Nos encontramos a la expectativa de cómo se desarrollen los contagios por covid-19 en nuestro país y, de mejorar la situación, estaríamos iniciando las atenciones a finales de año o inicios del 2023”, subrayó.
Estudiantes
Vestida con un mandil descartable celeste, una gorra azul que cubría totalmente su cabello, guantes blancos y con su mascarilla, encontramos a la estudiante de cuarto año de odontología Miriam Ancasi, quien manifestó que el retorno a las clases presenciales la ayuda a afianzar sus conocimientos teóricos y a aprender a manejar los equipos e instrumentos que su futura profesión requiere.
“Para nosotros es bastante bueno empezar a realizar nuestras prácticas sobre todo en los laboratorios ya que, por la pandemia de covid-19, se vio postergado. Ahora tenemos la oportunidad de tener una mejor formación académica”, manifestó.
Facultad de Educación
Por su parte, Miguel Inga, decano de la facultad de Educación, donde también se desarrollan clases presenciales, precisó que está realizando un trabajo de reincorporación de los alumnos en forma gradual, flexible y monitoreada sobre todo con las asignaturas que requieren espacios mayores para su aprendizaje, como los cursos de psicomotricidad, didácticas, laboratorios, danzas y folclor.
El número de estudiantes que se encuentran asistiendo a las clases presenciales es cerca del 25 % y lo hacen los martes, jueves y viernes respetando los aforos respectivos señalados por la facultad. De igual forma, se están tomando todas las precauciones necesarias en cuanto a la limpieza de las aulas, pasadizos y baños para evitar posibles casos de contagios de covid-19, enfatizó.