14:26 | Huánuco, feb. 21.
Representantes del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos restituyeron a sus familiares los restos humanos de Delmira Soledad Díaz López y Honorato Roberto Zevallos, víctimas del periodo de violencia entre 1980-2000 en una ceremonia realizada en la ciudad de Huánuco.
La entrega se concretó después de un trabajo conjunto entre la Dirección General de Búsqueda de Personas Desaparecidas (DGBPD), del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, y el Equipo Forense Especializado (EFE), del Ministerio Público.
En ceremonia realizada en el local de la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida), en Huánuco, el Estado peruano les brindó un reconocimiento digno a ambas
víctimas, reafirmando su compromiso con todos los afectados por el periodo de violencia entre 1980-2000 y en cumplimiento de la Ley N° 30470, Ley de búsqueda de personas desaparecidas, promulgada en el 2016 con la finalidad de contribuir a cerrar las heridas que aún permanecen abiertas.
Luego, los restos fueron trasladados a sus respectivos hogares, en donde los familiares los velaron, según sus costumbres y creencias, para luego ser enterrados de forma digna, otorgándoles nuevamente la identidad que perdieron hace 28 años.
En el caso de Honorato, sus restos descansan ya en el cementerio del caserío Ricardo Palma, ubicado en el distrito de Luyando, provincia de Rupa Rupa; mientras que los restos de Delmira se encuentran en el cementerio Divino Descanso de la ciudad de Huánuco.
Ambas
víctimas fueron secuestradas el 17 de julio de 1991, en el poblado de Puente Durand, ubicado en el distrito de Chinchao, provincia de Huánuco, para luego ser asesinadas y enterradas por Sendero Luminoso en una fosa común, en el caserío de Nueva Villa Paraíso.
Es necesario destacar que esta restitución se ha logrado mediante un esfuerzo interinstitucional efectuado para el cierre de este proceso, con el soporte de las Direcciones Regionales de Salud de Huánuco y San Martín a fin de asegurar la salud física y emocional de los familiares, así como el apoyo del Comité Internacional de la Cruz Roja para el traslado de los familiares y la donación de una capilla ardiente por parte del Gobierno Regional de Huánuco. También participó la fiscal adjunto provincial de Leoncio Prado, quien verificó las diligencias de armado y entrega de restos.
Además, este acto constituye el primero que realiza la DGBPD en Huánuco desde la promulgación de la ley, que otorga un enfoque humanitario al proceso de búsqueda, centrando las acciones en la recuperación emocional de los familiares de las víctimas, quienes participan activamente durante todo el proceso, tomando decisiones y recibiendo toda la información que solicitan, además del acompañamiento psicosocial.
Por último, el Ministerio de Justicia indicó que las personas desaparecidas durante el periodo de violencia en nuestro país, entre los años 1980 y 2000, superan las 20,000, según el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y Sitios de Entierro (Renade). De este total, más de 2,500 corresponden a Huánuco.
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(FIN) NDP/MAO
Publicado: 21/2/2019