Estudio da luces sobre la vida de personas esclavizadas en la Colonia y reconstruye fisonomía de una.
“Los cementerios de este tipo no eran frecuentes. Los dueños de esclavos mandaban a que se deshicieran de los cuerpos y eran enterrados por familiares en donde podían”, cuenta Santa Cruz.
El caso de esta hacienda era distinto. Era propiedad de la orden de los camilianos o padres camilos, que tienen como misión principal velar por los enfermos. En la ciudad de Lima construyeron la iglesia de la Buena Muerte, por ejemplo.
Por ello, de acuerdo con la explicación de Santa Cruz, se preocuparon por catequizar a las personas esclavizadas a su cargo y que estas recibieran cristiana sepultura.
Menciona que aún no han rescatado todos los cuerpos de este camposanto, pero que su cifra total podría acercarse a la del cementerio de esclavos más grande hallado en América, que se encuentra en Nueva York.
Descifrando el pasado
Un dato que da es que más de la mitad de los cadáveres hallados son de niños. Uno de los cuerpos de adultos, bautizado como Josef, por ser uno de los nombres más usuales en los registros de la hacienda, fue usado para reconstruir la fisonomía de uno de los que cumplían trabajos forzados en la hacienda.
Este trabajo lo hizo la especialista estadounidense Claire Maass y fue patrocinado por la empresa Cálidda. Del estudio, se supo que el sujeto había fallecido entre los 30 y 34 años. La esperanza de vida de varones en la hacienda era de 40, mientras que para las mujeres, 30.
Asimismo, se notaban las secuelas de los trabajos pesados que tuvo que ejecutar. Por ejemplo, sufría de osteoartritis y tenía fracturas en la columna y brazos.
Vida diaria
Santa Cruz contó que los trabajos han permitido conocer más de esta población, invisibilizada por siglos. Por ejemplo, se encontraron objetos que demostraban el éxito de la labor evangelizadora.
Por ejemplo, un contexto funerario tenía una pieza de nácar tallado con la figura de san Antonio de Padua.
Pero también se encontraron ejemplos de algunas prácticas de África. Los dientes de algunos sujetos estaban limados, usos habituales en ese continente.
No obstante, precisa que no se puede decir en este momento si eran africanos esclavizados o afroperuanos que mantenían esa costumbre. “Un estudio de ADN lo confirmará”, sostuvo el arqueólogo.
Publicado: 1/7/2021