El ministro del Ambiente, Manuel Pulgar-Vidal, aseguró que las últimas medidas planteadas por el Ejecutivo para dinamizar la economía, no limitan la fiscalización ambiental que ejerce su sector sobre las industrias extractivas.
"El Ministerio del Ambiente ni está disminuido, ni le han cortado los brazos y sigue luchando y seguirá ejerciendo sus competencias, con el mismo ímpetu como lo hemos hecho siempre", afirmó en entrevista con Canal N.
Pulgar-Vidal señaló que seguirá luchando por los principios ambientales con todo el respaldo del gobierno, tras descartar que haya pensando en renunciar.
"El jefe de los bomberos no renuncia en un incendio", anotó.
Indicó que, por ejemplo, la propuesta para reducir en 30 por ciento el monto de las multas que aplica el Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA) “no la limita en lo más mínimo para cumplir con su función”.
Subrayó que lamentablemente hay voces dedicadas a crear “fantasmas”, como exceso de permisología o arbitrariedad de las multas, “con la clarísima intención de desaparecer a la OEFA” o minimizar los controles ambientes.
Representantes de esta posición –añadió- son el exministro de Economía, Pedro Pablo Kuczynski, quien propuso fusionar en un solo ministerio las carteras de Ambiente, Cultura y Turismo; y Beatriz Merino, quien pide que los controles sean posteriores a la ejecución de los proyectos en hidrocarburos.
También negó que haya perdido respaldo del gobierno y consideró que su sector ahora tiene el reto de explicar mejor las cosas.
Asimismo, aseguró que hay desinformación cuando se dice que los controles ambientales generan excesos de trámites o retrasan las inversiones.
Puso como ejemplo el caso de los hidrocarburos, donde existen 91 procedimientos para aprobar un proyecto, de los cuales 25 % son ambientales, y solo uno de estos trámites está a cargo del sector Ambiente.
Igual sucede con la OEFA, donde el 4 % de la supervisión tiene sanción, y el 81 % de los procesos revisados son herencia de Osinerming.
(FIN) EGZ/CCR
Publicado: 22/6/2014