El proyecto Reducción del riesgo en áreas vulnerables de Pamplona Alta (San Juan de Miraflores), busca que el gobierno local, organizaciones vecinales y población del sector de Nueva Rinconada desarrollen sus capacidades, reduzcan su vulnerabilidad y el riesgo de desastres de manera eficaz, participativa y concertada, en articulación con el gobierno metropolitano y el nivel nacional, afirmó el especialista en Gestión del Riesgo de Desastres del Centro de Estudio y Prevención de Desastres (Predes), Arturo Liza.
Sostuvo que este proyecto es financiado por la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid) y ejecutado por Predes en convenio con la Municipalidad Distrital de San Juan de Miraflores.
“Más de 5,000 familias de más de 100 asentamientos humanos han sido capacitadas sobre normas de conducta ante sismos y otros peligros en Nueva Rinconada, procedimientos para elaborar un plan familiar de emergencia, así como el contenido de una mochila de emergencia, a través de la campaña Familia Preparada, Barrio más seguro”, aseveró.
Asimismo, Liza comentó que más de 1,600 personas de los asentamientos humanos priorizados por el proyecto han sido beneficiarias de la entrega de artículos alimentarios y de higiene como parte de las acciones de respuesta humanitaria en el contexto de la emergencia sanitaria ante la pandemia de la covid-19.
“Igualmente, más de 70 vecinos de San Juan de Miraflores fueron reconocidos por la Municipalidad Distrital como voluntarios en emergencia y rehabilitación (VER), luego de culminar satisfactoriamente el programa de formación de voluntarios con clases teóricas y prácticas, con una duración de dos meses y medio”, detalló.
De acuerdo con el diagnóstico de riesgo elaborado por Predes, Usaid y en convenio con la Municipalidad de San Juan de Miraflores, alrededor de 60,000 personas se encuentran en muy alto riesgo en este distrito y otras 130,000 están entre muy alto y alto riesgo de las cuales 21,500 personas viven en Nueva Rinconada.
Cabe precisar que 25 asentamientos humanos priorizados por el proyecto cuentan con un plan comunitario de emergencias, el cual establece estrategias de la organización comunal para la planificación e implementación de tareas y actividades de preparación y coordinación, procedimientos de alerta y respuesta a emergencias o desastres, a fin de brindar una atención oportuna.
Más en Andina: