El programa Contigo del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis) destacó el acompañamiento presencial que el equipo de facilitadores sociales brinda a los usuarios para la elaboración del Plan de Inclusión Familiar (PIF) en hogares.
Este servicio ya alcanzó a 530 familias de los distritos de Bambamarca (Cajamarca), Zorritos (Tumbes), Napo (Loreto), Andabamba (Huancavelica), Chavinillo (Huánuco) y Accomarca y Saurama (Ayacucho) hasta diciembre del 2022.
En el marco del Día Internacional de la Familia, el
programa Contigo del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis) recordó la importancia de la elaboración del Plan de Inclusión Familiar (PIF), que los facilitadores sociales trabajan con los usuarios y sus cuidadores.
El
objetivo es fomentar un entorno inclusivo que posibilite una oportunidad de mejora e integración de la
persona con discapacidad, tanto en el hogar como en la comunidad.
Durante la visita del facilitador social se firma un consentimiento informado de parte del usuario o el cuidador para dar inicio al trabajo. El proceso elaboración del PIF y su versión final ayudarán al reconocimiento de las habilidades, actitudes y comportamientos de los usuarios, a fin de tomar decisiones y plantearse metas.
En el PIF se incluye un diagnóstico, la visión y programación de actividades, resaltando las particularidades de cada usuario y de su entorno.
Precisamente, en la primera visita al hogar, el facilitador social trabaja la importancia de la planificación. Tras ello, mediante herramientas que incluyen juegos lúdicos y dibujos, los integrantes del hogar realizan los mapas “parlante diagnóstico” y “de visión”. Allí se fija cómo se ven, sienten y se quieren ver.
Con base en estos elementos, el facilitador social fomenta una “lluvia de ideas” para trazar las actividades a seguir en el PIF y lograr alcanzar la visión elaborada por el usuarios, cuidadores y miembros del hogar. Con las actividades ya identificadas, se hace la programación mensual para su implementación. De esta forma, se fomentan las responsabilidades individuales y colectivas.
La labor del facilitador social en sus visitas es hacer seguimiento y acompañamiento al cumplimiento del PIF, pero sobre todo motivar y estimular a que cada integrante del hogar honre sus compromisos.