Tras lamentar el deceso de dos habitantes que fueron sepultados por los dos deslizamientos –ocurridos el jueves 13 de abril último a las 11:00 horas y ayer viernes por la tarde–; así como la desaparición de otros seis pobladores y cuantiosas pérdidas materiales, el presidente de La Perla Chaupis dijo que existe la posibilidad de un traslado temporal a los centros poblados de Capia y Llancay hasta que se determine el lugar de mudanza definitivo.
Poma Vega afirmó que es la primera vez que ocurre un desastre de esta magnitud en el centro poblado La Perla Chaupis. “En toda mi vida nunca vi un desastre como este. Esto solo se ve en las películas, pero la realidad superó a la ficción. Las casas y seguramente las personas que están desaparecidas se encuentran sepultadas por toneladas de tierra y lodo”, aseveró.
Indicó que, según los especialistas que evalúan el terreno, la gran humedad generada por las intensas lluvias que se registran en esta zona ocasiona nuevos movimientos de tierra que empujan lentamente a las viviendas parcialmente cubiertas ubicadas en la quebrada por donde cayó el deslizamiento y las está tapando progresivamente. “De continuar este proceso, los predios terminarán cubiertos por tierra y piedras”, manifestó.
Como otros pobladores damnificados, Poma Vega también lo perdió todo cuando su vivienda y todos sus bienes fueron sepultados por completo por el alud. “La casa que construyeron mis padres hace 50 años y donde yo vivía desapareció por completo cubierta por el deslizamiento”, expresó al afirmar que él se salvó de morir porque al dedicarse a la cerrajería estaba realizando un trabajo fuera de su casa.
Al considerar que tuvo una enorme suerte al librarse de una muerte segura y pese a que ahora es uno de los más de 50 damnificados que perdieron todo su patrimonio, David Poma Vega señala que “mientras hay vida hay esperanza”.
Agregó que se percató del aluvión cuando se encontraba en el tercer piso de una vivienda haciendo trabajo de cerrajería y avisó con gritos a los estudiantes del colegio Los Atavillos, que se encontraban en horario de recreo, para que salieran del plantel lo más rápido posible. “Felizmente estaban en recreo y pudieron evacuar rápido. Si hubieran estado en clase creo que ahora estaríamos lamentando su fallecimiento”, expresó.
El presidente del centro poblado se aloja temporalmente junto a otros 30 damnificados en el local comunal, donde reciben la ayuda humanitaria trasladada por las autoridades.
Poma Vega asegura que en su condición de presidente del centro poblado él será el último en evacuar la peligrosa zona. “Creo que este pueblo va a ser inhabitable. Como presidente estoy dando todo lo que puedo hasta el final. No voy a irme hasta que no salga el último de los pobladores. Yo seré el último en irme”, enfatizó.
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