Andina

Por la ruta del amor a 8 horas de Lima: Huánuco - Tingo María

Aproveche el fin de semana largo y conozca algo más del Perú

La casa de la Perricholi. ANDINA/archivo

La casa de la Perricholi. ANDINA/archivo

11:45 | Lima, ago. 28.

Por José Luis Jaramillo

Se aproxima el fin de semana largo y si quiere escapar del estrés citadino que mejor forma de hacerlo que viajando por la denominada ruta del amor a 8 horas de Lima: Huánuco - Tingo María.

Teniendo como primera parada la histórica ciudad de la Perricholi se puede degustar de una de las mejores gastronomías del Perú y conocer, in situ, como no, la casa de Micaela Villegas en Tomayquichua.

Obviamente, todo debe empezar recargando baterías y que mejor que hacerlo en uno de los mejores restaurantes de Huánuco: Pillco Mozo Café.

En el restaurante autodenominado de tradición huanuqueña puedes encontrar el verdadero cuy serrano en sus diversas presentaciones, patita con maní, cau cau, patasca, entre otros platos. Que chef por Dios.

Todo ello acompañado, por supuesto, por un café pasadito y el verdadero mate de coca, con hojitas de coca frescas en una tacita de barro que conquista cualquier corazón. ¡Asu que detalle!. Y lo mejor de todo es que están a la venta allí mismo. 




Claro está que Huánuco tiene varios lugares turísticos, pero nos vemos obligados a centrarnos en Tomayquichua.

Tomayquichua tiene un encanto que envuelve y que seduce a volver o quedarse. Sus casitas, su pequeña plaza, su café y la casa de la Perricholi son el pretexto para regresar una y otra vez. Con razón el virrey Amat perdió la cabeza por estos lares y por nuestra Micaela Villegas.

Es impresionante como la recreación de la casa de nuestro personaje tan peruano, como es Micaela Villegas, puede trasportarnos a otra época con sus utensilios de barro, pozo de agua, carruaje, entre otros.


Tingo María


Tingo María es otra ciudad que no necesita carta de presentación. 

La Alameda en el centro de la ciudad, la Cueva de las Pavas, la Cueva de las Lechuzas, el zoológico, la Bella Durmiente, las incontables cataratas, entre otros atractivos, hacen de Tingo María un destino obligado.

La gastronomía por supuesto que no podía quedar de lado en la "entrada de la selva" como es conocida Tingo María.

Y a mi entender, salvo mejor parecer, la mejor comida típica, cabe decir, tacacho, chorizo, cecina, entre otros, se encuentra en las afueras de la Cueva de las Pavas y al precio justo.




¿Y los noctámbulos?


Por último y no por ello menos importante: Huánuco y Tingo María no tienen nada que envidiarle a la vida nocturna de Lima.

Sino que lo digan los caseritos de Makondo y Kilombos en Huánuco, y La Kabaña en Tingo María. 

Claro que algunos echamos de menos aun al inigualable Full Top en Tingo María y los conocedores me darán la razon, pero lamentablemente desapareció. Como dicen, de lo bueno solo por un tiempo.


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(FIN) JJN/JJN

Publicado: 28/8/2018