El 90 % de los casos de Parkinson empezarían después de los 40 años, pero generalmente se manifiesta entre los 50 y 60 años y afecta de igual forma tanto a hombres como a mujeres, manifestó el doctor Carlos Cosentino Esquerre, neurólogo del Instituto Nacional de Ciencias Neurológicas (INCN).
En el Día Mundial del Parkinson, que se conmemoró el 11 de abril, el galeno indicó que esta es una enfermedad neurodegenerativa, progresiva y crónica la cual provoca que algunas partes del cerebro empiecen a envejecer de manera acelerada causando serios daños neurológicos.
Esto se debe, agregó, a la falta de producción de una sustancia llamada dopamina que ayuda a controlar el movimiento muscular en la persona.
“El Parkinson es una enfermedad democrática porque afecta casi por igual a hombres y mujeres. En relación a la edad podríamos decir que el 90 % de todos los casos de Parkinson empezarían después de los 40 años. Esta es una enfermedad de la adultez tardía, pero existe un 10 % que podría iniciar antes de los 35 o 30 años, aunque son situaciones raras. Por otro lado, el pico de la enfermedad está entre los 50 y 60 años”, declaró al programa Andina Al Día.
A nivel mundial, dijo, se ha determinado que, por cada mil habitantes, 1 persona padece de Parkinson. En nuestro país, indico, a pesar de que no existen cifras exactas sobre el tema se calcula que habría cerca de 30 mil personas que sufren este mal y que solo en Lima se congregaría alrededor de 10 mil casos.
Lamentablemente, el Parkinson es una enfermedad que no tiene cura debido a que aún se desconocen las causas que lo provoca. Hasta el momento, la única medicina que ayuda a retrasar el proceso de esta patología es la Levodopa, fármaco que restituye la cantidad de dopamina que le falta al cerebro mejorando los síntomas del paciente, subrayó.
Síntomas
El neurólogo explicó que los síntomas más comunes que presentan los pacientes con Parkinson son temblores en las manos o los pies, que aumentan de manera progresiva; lentitud de movimientos o una pérdida de la habilidad para manipular las cosas, caminar o vestirse y por último una rigidez muscular.
Cosentino explicó también que la única forma de diagnosticar este mal es a través de la evaluación clínica y que no existe, por el momento, alguna prueba de laboratorio o exámenes auxiliares que determinen o confirmen la enfermedad.
“Para diagnosticar Parkinson el medico se basa en lo que nos cuenta el paciente, en lo que encontramos a la hora de examinarlo y nada más. De nada me sirve pedirle una tomografía, resonancia magnética o un encefalograma porque no existe un examen auxiliar que nos confirme esta enfermedad. Por eso, el diagnóstico debe hacerlo el neurólogo”, especificó.
Un diagnóstico temprano, explicó permitirá brindar un tratamiento oportuno que no solo se basará en la ingesta de medicamentos sino en la actividad física, programas de fisioterapia, caminatas, ejercicios, etc., lo que le dará una mejor calidad de vida al paciente.
Con un adecuado acompañamiento médico, insistió, la persona puede realizar sus actividades diarias con total normalidad por muchos años más siempre y cuando siga las indicaciones de los especialistas.
La finalidad de conmemorar el Día Mundial de Parkinson es crear conciencia en la población acerca de esta enfermedad que afecta a millones de personas en el mundo y lo oportuno que son los diagnósticos tempranos para retrasar esta patología que no tiene cura, recalcó.
“Esta es una enfermedad que necesitamos seguir estudiándola, poniendo más recursos económicos y humanos para combatirla. Actualmente existen cálculos que dicen que en los próximos 20 años la cantidad de pacientes con Parkinson se va a duplicar eso significa que es una enfermedad que nos va a acompañar en mayor cantidad por lo que tenemos que seguir concientizando”, puntualizó.
En el año 1997, la Organización Mundial de la Salud (OMS) estableció el 11 de abril como el Día Mundial del Parkinson en conmemoración del neurólogo británico, James Parkinson que padeció y describió los síntomas de la enfermedad en 1817.