El avistamiento de un oso de anteojos en el Parque Nacional Yanachaga Chemillén, ubicado en la provincia de Oxapampa, región Pasco, da cuenta de la presencia de esta especie en parte de la amazonia peruana, y subraya la necesidad de seguir trabajando para su preservación, al verse ella en peligro.
La sorpresiva aparición de este animal –cuyo nombre científico es Tremarctos ornatus- fue captada por la guardaparques Margarita Vera Verde, quien pudo captarla en vídeo gracias a su teléfono móvil.
El oso de anteojos se acercó hasta el puesto de control San Alberto, del referido parque nacional, situado en el departamento de Amazonas. Con tranquilidad y sin apuros, recorrió el sendero habilitado para los visitantes humanos a este lugar.
El ejemplar transitó con tranquilidad, en actitud acorde con su naturaleza pacífica. El vídeo se ha viralizado en redes sociales y muestra la riqueza y la diversidad natural existente en la amazonia peruana.
En Tunquimayo
Este avistamiento se suma al registrado el 14 del presente mes en la Reserva Natural de Tunquimayo, donde también un ejemplar de esta especie se manifestó ante los ojos humanos.
Esto ocurrió en el distrito de Santa Ana, en la provincia de la Convención, en el departamento del Cusco. Allí, el ciudadano Walberto Ortega Zárate vio a un oso de anteojos trepando uno de los árboles situados en el sector conocido como Idma Tunquimayo.
El poblador venía abriendo un sendero a fin de procurar acceso hacia las cataratas que se encuentran en dicha zona de la ceja de selva amazónica cusqueña, cuando los ruidos hechos por el oso de anteojos le llamaron la atención.
En aquel momento, el oso reparó en su presencia y se trepó a un árbol.
Importancia de esta especie
El oso de anteojos es la única especie de oso que habita en América del Sur. Su habitat natural son los bosques húmedos que se sitúan en países como Perú, Brasil, Ecuador, Colombia y Venezuela a aproximadamente 3000 metros sobre el nivel del mar.
Su importancia para el ecosistema de los bosques amazónicos es el de dispersar las semillas de los frutos que consumen como alimento, garantizando así la preservación de estos ambientes.
Además, construyen sus lugares de descanso en los árboles, dejando en ese proceso espacios libres que permiten que los rayos del sol lleguen al bosque, permitiendo el desarrollo de otras especies vegetales en aquel lugar.
Su importancia ha llevado a que en Perú, Bolivia, Ecuador y Colombia se establezcan compromisos para proteger a esta especie. En base a ello, el Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre ha desarrollado un plan nacional para su conservación: iniciativa que cuenta con aristas multisectoriales.
(FIN) FGM/MAO
JRA
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Publicado: 29/10/2025