Desde tempranas horas de hoy lunes 14 de marzo, los colegios públicos abrieron nuevamente sus puertas para recibir a los más de 4 millones de escolares que retornaron a las clases presenciales, para lo cual las autoridades de los planteles deberán cumplir una serie de medidas de bioseguridad que garanticen un regreso seguro a clases.
El doctor Mario Izquierdo, especialista en salud pública del Ministerio de Salud (Minsa), dijo al programa Andina al Día que dicha institución ha establecido diversos protocolos y acciones que están diseñados para cuidar al estudiante contra covid-19 no solo durante su estancia en la institución educativa sino desde que el escolar sale de su casa, motivo por el cual se viene impulsando la campaña “Todos vuelven sanos y protegidos al cole”.
Una de las primeras recomendaciones del especialista es que todo estudiante tendría que llevar una mascarilla adicional al colegio por si la que utiliza se ensucia o deteriora durante las clases, además de portar, de preferencia, el alcohol en gel porque éste garantiza una película de protección sobre las manos mucho más tiempo, y es menos irritante que el alcohol líquido.
Al momento de usar el transporte público o movilidad escolar para dirigirse a su centro de estudios es importante que el niño o adolescente evite quitarse la mascarilla o consumir alimentos dentro de este medio, acotó el especialista.
Una vez en el centro de estudios, dijo, los docentes deben cuidar que los alumnos respeten el distanciamiento social y las señalizaciones dispuestas por colegio con la finalidad de que este regreso a clases se realice de la forma más segura para tranquilidad de los miles de padres de familia.
Vacunación en docentes
Izquierdo mencionó también que todo el personal docente, administrativo e incluso el de servicio de limpieza tienen la obligación de estar inmunizados con las tres dosis de la vacuna contra el covid-19 porque, de acuerdo con la evidencia científica, se ha demostrado que, de haber completado el esquema de vacunación, la persona cuenta con una mayor protección contra el coronavirus.
Asimismo, durante el desarrollo de las clases es importante que los docentes reiteren a los alumnos que no deben retirarse la mascarilla salvo el momento donde tengan que consumir sus alimentos, pero éste tendrá que darse en un ambiente ventilado y al menos a 1 metro y medio de distancia, remarcó.
“El centro educativo debe garantizar que los estudiantes, al consumir sus alimentos deben guardar un distanciamiento de 1 metro y medio de distancia y de preferencia en un espacio abierto donde puedan con tranquilidad retirarse la mascarilla para luego retornar a clases”, precisó.
Covid-19 en la escuela
De detectarse, un presunto contagio por covid-19 en el colegio, las autoridades del centro educativo deben notificar inmediatamente a los padres de familia para que recojan a su niño de la escuela. El docente, de forma empática, tendrá que retirar al menor del aula a fin de resguardar la salud de los demás escolares.
Por tal motivo, el experto dijo que, si los padres observan que su hijo ha amanecido con secreción nasal, malestar general, y estornudo lo mejor es que no asista al colegio hasta confirmar o descartar que se encuentre contagiado con el virus de covid-19.
Agregó que luego de aislar al niño, las clases deberían continuar normalmente salvo que haya existido una mayor exposición del menor con otros escolares sobre todo sin el uso de la mascarilla elemento vital para evitar la propagación del coronavirus.
Para tal efecto, refirió, el Minsa viene capacitando a más de 25,000 docentes a nivel nacional con cursos sobre prevención y manejo de la covid-19 en los colegios, tanto en el aspecto de bioseguridad como en la parte psicológica porque muchos de los alumnos necesitan de un apoyo emocional ya que algunos escolares podrían estar sufriendo del síndrome del encierro o locked-in tras dos años de clases virtuales por la pandemia.
“Es importante que los padres conversen con sus hijos de lo que será este retorno a clases porque luego de haber estado confinado 2 años en el domicilio podrían haber generado el síndrome de locked-in o síndrome del encierro donde, para el niño o adolescente, la escuela puede convertirse en un espacio extraño que le causaría ansiedad o incomodidad”, subrayó.
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(FIN) ICI/LIT
JRA