Un avión del Ejército del Aire español aterrizó este martes en una base aérea militar de Beirut con ayuda de emergencia para el Líbano tras la explosión del 4 de agosto en el puerto de la ciudad mediterránea, que ha dejado más de 160 muertos y 6.000 heridos.
El cargamento incluye 10 toneladas de harina de trigo donados por la Fundación Internacional Olof Palme, así como suministros médicos y Equipos de Protección Individual (EPI) enviados por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), que también ha puesto a disposición de las autoridades libanesas equipos de cobijo para los libaneses que se ha quedado sin hogar.
El embajador de España en el Líbano, José María Ferre de la Peña, acudió junto a autoridades militares libanesas a recibir la ayuda de emergencia. El diplomático explicó a Efe que toda la ayuda va a ser "unificada por el Ministerio de Defensa libanés" que en este momento es "el único que se está ocupando de estas cuestiones", en virtud del "estado de emergencia en el país vigente hasta el 30 de agosto".
El envío de harina de trigo se planteó después de que la ministra de Asuntos Exteriores española, Arancha González Laya, hablara con su homólogo libanés, Charbel Wehbe, que le solicitó este producto básico porque "las reservas libanesas de harina habían prácticamente desaparecido", afirmó Ferre de la Peña.
Asimismo, indicó que España está "dispuesta" a continuar la ayuda humanitaria al Líbano, agregando que otro cargamento de la Comunidad de Madrid está listo para salir rumbo a Beirut en el marco de la ayuda de Protección Civil de la Unión Europea.
La explosión hace una semana de casi 3.000 toneladas de nitrato de amonio en un almacén del puerto causó la destrucción de los silos de trigo que estaban en sus instalaciones, lo cual ha afectado a las reservas de este alimento básico para la población.
El Programa Mundial de Alimentos (PMA) mandará al país árabe trigo suficiente para un periodo de tres meses y el primer envío de harina será efectuado en los próximos días, informó hoy a Efe una fuente del organismo.
Tanto las agencias de la ONU, como organizaciones humanitarias y la comunidad internacional están apoyando al país de los cedros tras la explosión que ha dejado a más de 250.000 personas sin hogar y los barrios céntricos de la capital arrasados, mientras una veintena de personas continúa desaparecida.